La votación de la elección de la sede del Mundial 2026 ahora se hará por el pleno del Congreso de las federaciones miembro de la FIFA —una reforma acordada a raíz de las polémicas generadas con la decisión del comité ejecutivo de otorgar a Rusia el Mundial de 2018 y a Catar el de 2022.
Aun así, el tema más importante de la agenda es la confirmación de que el torneo de 2022 se jugará en noviembre y diciembre para evitar el calor de junio y julio.
Un equipo de trabajo asignado por la FIFA recomendó el mes pasado la opción de sostener partidos a finales de año en Doha pese a la oposición de las ligas y clubes europeos que se quejan de tener que interrumpir sus actividades durante varias semanas a mitad de sus temporadas.
Ante la necesidad de fijar las fechas exactas de juegos, la FIFA ha sugerido un torneo de 28 días en lugar de los 32 días a fin de recortar el tiempo en que los clubes deberán ceder a sus jugadores a sus respectivas selecciones nacionales.
El presidente de FIFA, Joseph Blatter, dijo que desea que la final se lleve a cabo el domingo 18 de diciembre —día nacional de Catar— en contra del deseo de la UEFA para que el partido por la copa se realice el viernes 23 de diciembre.