Consumidores estadounidenses, europeos y asiáticos están cada vez más interesados en comprar esta fruta, también conocida en Sudamérica como palta.
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Por qué se ha disparado el precio del aguacate y hasta cuándo seguirá subiendo
Hay un "boom" del aguacate a nivel global.
El precio del aguacate en EE. UU. aumentó a principios de julio un 130% en comparación con el año anterior, lo que supuso el valor más alto alcanzado en más de una década. (Foto Prensa Libre: Getty Images)
“La gente está enamorada del aguacate”, le dice a BBC Mundo David Magaña, vicepresidente y analista sénior de la consultora RaboResearch Food & Agribusiness, con sede en Estados Unidos.
“Es la fruta cuyo consumo ha aumentado más en la última década a nivel global”.
Aunque más del 80% del aguacate en EE.UU, proviene de México, la primera economía del mundo también produce esta fruta en California y, recientemente, ha comenzado a importar aguacate de Perú y de Colombia.
El “boom” global por el aguacate
“Al menos en Estados Unidos, la demanda está en su punto más alto en la historia“, explica Magaña.
Y las razones son varias: es versátil (se puede usar en muchos platos); los restaurantes lo incluyen cada vez más en sus menús y se ha vuelto más popular en la cocina de las casas.
Eso se debe a que la gente le agrega aguacate a las hamburguesas, a los sándwich o a las tostadas, entre otros, y que suponen nuevos hábitos de consumo que se suman a la expansión de la gastronomía mexicana.
El valor del aguacate hass de tamaño medio al por mayor llegó a US$85 la caja de 25 libras (11.3 kilos) en la primera semana de julio, el precio más alto en esta época del año desde que se llevan registros (unos 15 años).
Eso es un 130% más que el mismo mes del año pasado.
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Y aunque en agosto el precio de la caja ha bajado a unos US$65 (porque California está produciendo más), aún se mantiene alto.
De hecho, un precio promedio normal se sitúa entre los US$30 o US$40 la caja.
Las razones de la frenética escalada
Según Magaña, el récord del precio en las últimas semanas en el mercado estadounidense se produjo por una combinación de factores.
- La producción en California bajó a la mitad. Hubo una ola de calor que impactó la floración.
- Como había escasez, México cosechó antes para suplir la falta de aguacate de California, con precios más elevados.
- En julio hubo una transición de temporadas entre la cosecha anterior y la nueva, que hizo subir aún más los precios
- La demanda estadounidense está en su punto más alto.
El precio depende de cómo se combina la cosecha de California y la de México. En teoría, en octubre lo precios deberían estar mucho más bajos, siguiendo una tendencia de reducción gradual.
“Esperamos que en el primer semestre de 2020 los precios regresen a la normalidad” en el mercado estadounidense, proyecta el analista, siempre y cuando no haya interrupciones en el suministro desde México, ya sea por razones climáticas, huelgas o cualquier otro motivo.
Otro aspecto interesante desde el punto de vista de la oferta es que el aguacate tiene un ciclo alternado de dos años: este año era el ciclo bajo (menos fruta en los árboles) y el próximo toca el “año bueno”.
Justamente para evitar tanta volatilidad en los precios y responder al alza en la demanda, grandes cadenas de restaurantes como Chipotle, están aumentando la importación de aguacate proveniente de Perú y mirando hacia otros mercados como Chile, para suplir una parte de sus compras en períodos de escasez.
¿Qué está pasando en México?
En algunos comercios pequeños de Ciudad de México el kilo de aguacate llegó en julio a los US$6, marcando un alza superior al 120%.
Pero ese fue un caso extremo que no representa la media del mercado local.
Comparando julio de este año con el mismo mes del año anterior, el precio promedio para el consumidor mexicano aumentó 38%, le dice a BBC Mundo Juan Carlos Anaya, director del Grupo Consultor de Mercados Agrícolas (GCMA).
Pero donde se produjo el mayor incremento fue en el aguacate mexicano de exportación, con un alza del 85% en el mismo período, una cifra récord en más de una década.
“El aumento del precio del aguacate se debe principalmente a que la producción cayó por razones climáticas y la demanda siguió aumentando”, explica Anaya.
“Es un tema de oferta y demanda, el mercado se encarga. Esto es bueno para el productor y malo para el cliente”.
“Mi esposa me dice que está demasiado caro y yo le digo: ‘Pues compra menos'”.
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En los próximos meses el precio bajará, pronostica Anaya, básicamente porque aumentará la producción.
Sin embargo, su proyección es que más allá del factor estacional, la demanda de Estados Unidos seguirá creciendo y, por lo tanto, los precios tenderán a estabilizarse en un rango un poco más alto que los valores históricos.
A nivel mundial, México es por lejos el principal productor y exportador de este producto. Tanto es así, que concentra tres cuartas partes de todo el aguacate que se produce en el planeta.
Y dentro de México, la mayor parte de la producción proviene de Michoacán.
El “guacamole falso”
Con estos precios históricamente altos, no es de extrañar que en restaurantes mexicanos y estadounidenses sirvan el llamado “falso guacamole”, que en realidad es una salsa de aguacate sin aguacate.
En esta salsa, el aguacate es sustituido por calabacín, un vegetal que en México es llamado calabacita.
El calabacín aporta una consistencia y sabor similar al aguacate cuando se condimenta con tomate verde o tomatillo, ajo, cilantro, jalapeño, sal y aceite vegetal, razón que explica por qué mucha gente no se da cuenta del cambio.
Expertos en gastronomía mexicana dicen que sería más correcto decir “falsa salsa de aguacate”, porque ese es el producto que se vende adulterado.
Sin embargo, para el paladar no especializado como el de los turistas que van a México y los consumidores de otros países, guacamole y salsa de aguacate pueden ser prácticamente lo mismo.
Y como la receta de la salsa con calabacín tiene un sabor que parece de aguacate real, es difícil no caer en el engaño.
Es probable que esta práctica siga existiendo si los precios siguen al alza a nivel global en los próximos años.
“El comercio de aguacate fresco y su consumo ha subido en los últimos 15 años”, declaró Philippe Binard, gerente de Freshfel Europe, la Asociación Europea de Productos Frescos.
Y en la última década se disparó, agregó. La producción mundial de esta fruta pasó de tres millones de toneladas métricas hace una década a cerca de cinco millones de toneladas métricas, según los últimos datos disponibles.
En ese escenario, al liderazgo indiscutido de México se sumarán otros países que quieren aumentar sus exportaciones en los próximos años como Perú, Colombia, Chile, Indonesia y Kenia.
Y un dato clave que facilitó Binard: el consumo per cápita de aguacate en EE.UU. se ha más que triplicado desde el año 2000.
Así las cosas, parece que el “boom” del aguacate está lejos de llegar a su fin.