Economía

Cómo evitar la cuesta de enero

El consejo que doy a mis alumnos es este: “no formes barranco en Diciembre y así de seguro, no tendrás cuesta en Enero”.

Pero, porque pensamos en no gastar, pero al final paramos gastando. Esto tiene explicación en lo descubierto por Maslow, quien mostro científicamente que todos necesitamos no solo satisfacer nuestras necesidades físicas de comer, beber, vestirnos y tener un techo, sino con la misma urgencia, necesitamos satisfacer nuestras necesidades del alma o emocionales, como son: el ser estimados, sentirnos realizados, valorados, reconocidos, apreciados y que pertenecemos a un grupo.

Lo anterior lo saben y lo aprovechan los estudiosos de la conducta al servicio de la publicidad del sistema de consumo, quienes si nos dejamos, nos logran presionar a comprar, viajar, vestir, comer y visitar los lugares que los demás visitan, beber lo que otros beben, comer lo que comen, comprar lo que compran, y lucir lo que lucen para que podamos sentirnos que pertenecemos, realizados, reconocidos y aceptados, por los demás.

De ahí viene el dicho: “Gastamos en lo que no necesitamos, al crédito por no tener el dinero para comprarlo, solo para lucirlo ante gente que queremos impresionar, pero que poco le importa”.

Así es como insensata e injustificadamente, nos endeudamos y paramos gastando en aquello que no aumenta de valor, sino más bien cada día pierde valor, en perjuicio de nuestra economía.

Compramos porque cuando al adquirir algo, producimos una descarga de adrenalina, endorfina y serotonina las cuales producen euforia y alegría momentánea en nosotros y eso nos estimula a adquirirlo aunque con la razón sabemos que no es conveniente, ni sensato, ni prudente adquirirlo, pues altera nuestros planes de gastos y nos saca de nuestras metas y límites acordados. Pero pesa más el bienestar anímico, que la razón.

La publicidad, conocedora de nuestras ineludibles necesidades existenciales tales como: sentirnos que pertenecemos, sentirnos realizados, reconocidos y aceptados por los demás y sabedora de lo que experimentamos en nuestras emociones al comprar, es quien nos dicta las pautas a seguir para pertenecer o quedar fuera del establishment, es decir estar out o estar in, al gastar en lo que ella nos dicta gastar y las emociones por satisfacer.

Ella es quien nos orilla a creer que si adquirimos lo que ella nos invita adquirir, entonces nos sentiremos realizados, estaremos bien y seremos felices, y si no lo hacemos estaremos mal, infelices e irrealizado.

¿Que armas tenemos a nuestro favor? No hay mejor aliado para mantener sosegadas a nuestras emociones, que el dicho: “Ojos que no ven y oídos que no oyen, bolsa que no gasta” pues por los ojos entran las tentaciones y estímulos de gasto. Además, todos tenemos dos armas poderosísimas que se llaman: Libre albedrio la una y voluntad propia la otra. La primera nos permite decidir, irnos por lo que el sistema nos vende como indispensable para vivir, o no y la segunda nos hace mantenernos firmes ante la decisión tomada por nosotros.

Nosotros debemos sentirnos realizados por los triunfos obtenidos, y apreciados y valorados no por lo que lucimos, sino por lo que somos. Para salir económicamente bien nosotros, a pesar de, por encima de, y no importando lo que nos quieran dictar los encargados de mover el sistema, en beneficio de su macro economía, tendremos que tomar decisiones distintas a las que la mayoría toman y velar por el beneficio de nuestra micro economía personal.

¿Podremos algún día satisfacer cuanto antojo y gusto queramos? Así es, pero en esta etapa de nuestra vida, estamos para hacer un capital con la plata que nos cuesta generar, para luego invertirla y algún día vivir de lo que nuestras inversiones nos generen, para entonces sí, darnos el gusto de comprar, comer, viajar y gastar en lo que el sistema de consumo nos ofrece y necesita vender.

Recuerda el consejo: no formes barranco en Diciembre y así de seguro no tendrás cuesta en Enero. Haz un esfuerzo por apegarte a los que decidiste gastar en pólvora, regalos, cena y bebidas de Navidad y de Año Nuevo y así no tendrás nada que lamentar en Enero pues empezaras el año con el pie derecho.

Felices fiestas un bendecido 2016.

ESCRITO POR:

ARCHIVADO EN: