Además, los importadores tendrán la posibilidad de conocer la trazabilidad del proceso de despacho a través de la Agencia Virtual y podrán aplicar de forma voluntaria a las opciones que le permitan disponer de sus mercancías, como la rectificación, el registro de garantías y solicitar la entrega de los bienes o presentar las pruebas digitalizadas.
Las garantías (fianzas) pueden gestionarse por medio de entidades del sistema bancario o afianzadora, indicaron las autoridades de la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT).
El superintendente Marco Livio Díaz, dijo que es difícil determinar un costo promedio de mantener la mercancía en los almacenes de aduanas mientras dure un proceso de esa naturaleza, pero con el procedimiento antiguo requeriría de 25 a 30 días, ya que se requieren 10 días para notificar, otros 10 para presentar pruebas y 10 más para que se emita la resolución.
Con la nueva modalidad se podría reducir a hasta 2 días cada fase y la mercancía ya no tienen que estar en el puerto (por ejemplo), sino que puede salir y entonces ya se convierte en un tema administrativo.
“Si al importador le urge recibir sus productos, puede presentar la garantía y sacar de inmediato su mercadería al día siguiente de notificado; el plazo se reducirá a 2 o 3 días de operación”, comentó el jefe de la SAT.
Agregó que en el programa de duda razonable, la estadística de revisión es del 8% y se aplica cada vez que hay una duda razonable sobre el valor declarado en las aduanas, pero también influyen otros factores.
Según Werner Ovalle, intendente de Aduanas, el usuario podrá contar con la información detallada de las mercancías objeto de duda por parte del Servicio Aduanero, con los valores de referencia que origina la misma. También se designará personal especializado en el tema de valores para evaluar las pruebas de descargo, la aceptación o determinación del valor en aduanas.
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Antes, todo ese proceso estaba a cargo de una sola persona quien hacía el análisis, recibía las pruebas y evacuaba la audiencia en cada caso.
Con apoyo externo
El nuevo modelo es parte del Plan Estratégico Institucional 2021-2025 de la SAT, con el apoyo del programa Umbral, financiado por la Corporación Desafío del Milenio (MCC) y el soporte técnico de la Oficina de Asistencia Técnica del Tesoro de los Estados Unidos de América (OTA), informó la entidad.
El director de país de la MCC, John Wingle, informó que se financiaron proyectos por US$28 millones en los últimos años y ahora brindarán colaboración y acompañamiento para la implementación de la nueva herramienta.
Mencionó que la SAT tiene dos responsabilidades: facilitar el comercio y establecer controles fuertes para evitar que se engañe al sistema, por lo que se le apoyó durante los últimos 5 años con nuevas herramientas para detección de fraude.
El superintendente y la directora ejecutiva de la Cámara de Comercio Guatemalteco Americana (Amcham), Waleska Sterkel, coincidieron en que este nuevo sistema pondrá a las empresas en una posición más competitiva. Incluso, se gana competitividad ante la nueva demanda de nearshoring (compra o prestación de servicios desde países cercanos al contratante).
Para el 2022, se espera integrar el sistema de forma gradual en las aduanas de las portuarias y el resto de aduanas.
