Comunitario

En medio de la pandemia aumentan los casos de niños abandonados

En lo que va del año se reportan 170 niños abandonados, la cifra es superior a la registrada en todo el año pasando, cuando se llegó a 113 casos de menores que sufrieron abandono y fueron rescatados. En las últimas semanas las víctimas han sido recién nacidos.

El 13 de septiembre una bebé fue encontrada en la orilla de la carretera en Villa Canales. (Foto Prensa Libre: Bomberos Voluntarios)

El 13 de septiembre una bebé fue encontrada en la orilla de la carretera en Villa Canales. (Foto Prensa Libre: Bomberos Voluntarios)

El 6 de septiembre pasado un recién nacido fue abandonado en un terreno baldío en el municipio de San José Pinula. Llovía cuando socorristas lo localizaron envueltos en una sábana y nailon. Ese mismo día, otro bebé fue dejado en un área solitaria del sector II, de la calzada La Paz, zona 5 capitalina.

Ambos niños fueron trasladados por socorristas al Hospital San Juan de Dios para verificar su estado de salud. Se estableció que tenían pocas horas de haber nacido porque aún tenían el cordón umbilical.

No son los únicos casos recientes, un día antes, los pobladores de la aldea San Juan Comapa, en Jutiapa, escucharon entre los matorrales el llanto de un niño, al acercarse hallaron a un varón recién nacido dejado allí a su suerte. A la semana siguiente un hecho similar ocurrió en Villa Canales, una bebé, tenía horas de haber venido al mundo, fue encontrada a un costado de la cinta asfáltica en el km 14.5.

Gaby Ortega, trabajadora social de la Procuraduría de la Niñez y Adolescencia de la Procuraduría General de la Nación (PGN), indica que este año han recibido más reportes de niños abandonados, principalmente de recién nacidos. A la fecha ya se registran 170 casos en el país, mientras que de enero a diciembre del 2019 en total fueron 113.

La mayor incidencia de niños desamparados se da en la capital. Hasta el fin de semana pasado se contabilizaban 36 casos, seis menos para igualar la cifra registrada durante todo el año pasado, que resultó ser de 42.

¿Qué ha llevado a este aumento? Ortega refiere que es posible sea efecto de la pandemia. Durante estos meses la economía de las familias ha sido golpeada, muchas personas se quedaron desempleadas y sin recursos, situación que pudo influir en la decisión de desamparar a sus hijos.

En esa línea, Otto Rivera, de la Coordinadora Institucional de Promoción por los Derechos de la Niñez (Ciprodeni), señala que el 2020 podría cerrar con más casos de niños abandonados, ya que el impacto económico del covid-19 en la sociedad guatemalteca a duras penas comienza y es probable que se extienda al 2021.

Por otro lado, el confinamiento también crea condiciones psicosociales desfavorables, las madres no han tenido acceso a orientación sobre la maternidad y las instituciones que se ocupan de ello debieron implementar estrategias virtuales para dar información, las cuales no están al alcance de toda la población.

Tanto Ortega como Rivera no descartan que el abandono de bebés también pueda estar relacionado con embarazos en adolescentes. De acuerdo con el monitoreo del Observatorio en Salud Sexual y Reproductiva (Osar), para junio de este año un total de 29 mil 230 jovencitas entre 15 y 19 años se convirtieron en madres, mientras que hay 790 embarazos en niñas de entre 10 y 14 años.

Ante este panorama, el director de Ciprodeni refiere que Guatemala se encuentra entre los peor ranqueados en indicadores relacionados a niñez y adolescencia. Por ejemplo, siete de cada diez menores de 18 años vive en condiciones de pobreza, mientras que uno de cada dos niños menores de cinco años sufre de desnutrición crónica, a lo que se suman los embarazos en menores de edad.

“Esta situación nos vuelve a dejar como un país en el que la niñez y la adolescencia, y en este caso la primera infancia, no tiene una prioridad para el Estado”, menciona Rivera, lo que a su criterio fue evidente durante estos seis meses de pandemia, pues por parte de las autoridades no hubo “un mensaje de aliento ni de esperanza” para este sector de la población.

Trabajo de rescate

Gary Colajay, vocero de Bomberos Voluntarios, indica que en las últimas dos semanas rescataron a tres bebés que fueron abandonados, uno de ellos estaba muerto.

Un punto en común en estos casos es que son niños recién nacidos que fueron dejados en terrenos baldíos, a orillas de la carretera o en lugares poco transitados, al final, dice, la intención es que sean encontrados con vida. Los infantes estaban en vueltos en sábanas.

Como parte del protocolo los bomberos acuden al lugar luego de una llamada de alerta. Si el bebé está en un terreno inaccesible -barranco- lo rescatan. Se coordina con la Policía Nacional Civil (PNC) para que acudan al lugar, los socorristas hacen una evaluación preliminar del estado de salud del menor, y de ser necesario lo trasladan a un centro asistencial para un chequeo médico.

Muchos de estos niños presentan un cuadro de desnutrición, deshidratación e incluso neumonía por el tiempo que pasan a la intemperie.

Durante el traslado al hospital, la unidad de los bomberos es custodiada por una patrulla de la PNC, mientras que una agente viaja junto al niño en la ambulancia. Se contacta con la PGN para que atienda el caso.

Colajay señala que los dos menores encontrados con vida tenían pocas horas de nacidos, pues fueron hallados aún con el cordón umbilical.

Acciones de protección

Cuando la PGN constata que el niño ha sido abandonado se procede al rescate, menciona Ortega.

Tras la evaluación médica son llevados al Juzgado de niñez y adolescencia competente a la jurisdicción donde fueron localizados para iniciar un proceso de protección, bien pueden ser ubicados en un abrigo temporal o en el seno de una familia sustituta.

Desde el año pasado, según Lucrecia Prera, coordinadora del área de protección Judicial de la Procuraduría de la Niñez y Adolescencia, se realizan las gestiones necesarias para prevenir y evitar la institucionalización de los niños abandonados, por lo que la cantidad de menores institucionalizados ha disminuido desde el año pasado.

“Como parte de esas medidas es que se promueve la implementación de familias sustitutas, como alternativa de acogimiento no residencial”, agrega Prera.

Sanciones

Abandonar a un niño es un delito que puede llevar a la cárcel a quien lo cometa.

Según el Código Penal la sanción va de seis meses a tres años de prisión para la persona que esté al cuidado o tenga la custodia de un niño menor de 10 años y lo abandone.

Si a consecuencia de esta acción el niño muere la pena será de tres a 10 años tras las rejas. También se condena con tres meses a cinco años de prisión si se pone la vida del niño en peligro o si este sufre lesiones.

La normativa también castiga a la madre que pese a tener “alteraciones psíquicas” derivadas del parto, abandone a su hijo que “no haya cumplido tres días de nacido”. Ella sería sancionada con cuatro meses a dos años de cárcel.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

ESCRITO POR:

Ana Lucía Ola

Periodista de Prensa Libre especializada en temas comunitarios, con énfasis en Salud y Educación, con 17 años de experiencia. Reconocida con el Premio de Prensa Libre en categoría Reportaje, en 2019. Premio de la UPANA por Informar a la población guatemalteca sobre la realidad en nutrición y desnutrición en el país, en 2019. Diplomado El periodismo en la era digital como agente y líder de la transformación digital impartido por el Tecnológico de Monterrey.