“Frustradas por la falta de aplicación de las leyes penales, algunas comunidades han recurrido a la justicia por mano propia. Según datos del Procurador de los Derechos Humanos, 49 personas murieron durante linchamientos en 2013, lo que equivale a más del doble que en 2012”, reporta HRW.
Sin embargo, reconoce progresos en casos de delitos violentos, ejecuciones extrajudiciales y corrupción, en gran parte, dice el documento, al trabajo realizado por la exfiscal general Claudia Paz y Paz, y la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala.
El informe también menciona la condena de más de 100 años en prisión de nueve miembros del cartel de los Zetas por la masacre de 27 campesinos en Petén, y la red criminal que dirigía, desde la prisión, el capitán Byron Lima Oliva en complicidad con autoridades del Sistema Penitenciario.
Otro agente de la impunidad, según HRW, son las “maniobras dilatorias” de abogados defensores, incluido el “uso abusivo” del recurso de amparo, con lo que logran la postergación de los juicios durante meses o incluso años.