“Le he pedido al ministro de Gobernación que investigue este crimen porque no puede quedar en la impunidad. Todo apunta a que (el asesinato) fue ordenado por los pandilleros recluidos” en esa prisión, dijo Pérez Molina al condenar el hecho.
Corado, un exsargento del Ejército que tenía 15 días de haber asumido como director de “El Infiernito“, fue asesinado a tiros la noche del miércoles por hombres no identificados que lo emboscaron en una transitada avenida del sur de esta capital.
El ministro guatemalteco del Interior, Mauricio López Bonilla, dijo que el ataque fue perpetrado por al menos cuatro hombres armados que viajaban en motocicleta.
“El Infiernito” es una prisión de alta seguridad ubicada en el departamento de Escuintla, sur del país, en donde se encuentran recluidos peligrosos líderes de pandillas juveniles y narcotraficantes.
Aunque se desconoce el móvil del asesinato, López Bonilla dijo que podría tratarse por las “medidas disciplinarias” que había implementado en la prisión.
“Están equivocados los delincuentes si piensan que vamos a retroceder” , dijo el ministro durante un homenaje póstumo rendido a Corado en la sede de la Dirección General del Sistema Penitenciario de esta capital.
Rinden homenaje póstumo
Un homenaje póstumo se le rindió este jueves a Corado González, director de la cárcel de máxima seguridad El Infiernito, quien fue asesinado ayer en zona 10.
El féretro fue trasladado hacia las instalaciones del Sistema Penitenciario donde los trabajadores realizaron una valla, además se colocó la bandera nacional sobre el ataúd.
En las honras fúnebres estuvo presente el Ministro de Gobernación, Mauricio López Bonilla, quien declaró: “están equivocados los delincuentes si piensan que vamos a retroceder”, esto en referencia al accionar de las autoridades de seguridad.
Al ser consultado el vocero del Sistema Penitenciario, Rudy Esquivel, dijo que Corado González no había denunciando amenazas, ni tampoco había solicitado seguridad personal.