La cadena Fox informó, citando fuentes oficiales, que tal decisión no tiene precedentes en el sistema de migración estadounidense, pero está sobre la mesa porque la Patrulla Fronteriza “no tiene más remedio que liberar a las personas casi inmediatamente después de la aprehensión porque no hay espacio para mantenerlas ni siquiera para hacer los trámites necesarios del Aviso por Comparecer (NTA)”.
La liberación dejaría en los migrantes la responsabilidad de solicitar el NTA ante el Servicio de Migración y Control de Aduanas (ICE).
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Los cruces fronterizos están rebasados en un 700%, obligó a Biden a desplegar a la Guardia Nacional y al Departamento de Salud a abrir otra instalación para niños no acompañados en Pecos, Texas.
Otra opción en análisis es trasladar a migrantes hacia la frontera con Canadá para su procesamiento, según el Washington Post.
“Estamos en camino de encontrarnos con más personas en la frontera suroeste que en los últimos 20 años”, dijo esta semana Alejandro Mayorkas, secretario de Seguridad Nacional, que sostuvo que la situación “no es nueva” y porque Estados Unidos ha enfrentado picos fronterizos antes.
Hasta el 21 de marzo, había 5 mil 49 niños y adolescentes bajo la custodia de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza), que tiene a su cargo la Patrulla Fronteriza, y un total de 9 mil 830 migrantes de todas las edades; frente a los 4 mil 615 menores y el total de 7 mil 970 indocumentados que esta agencia tenía en sus manos el 18 de marzo.
