Migrantes

Trump culpa a demócratas de condiciones en centros de detención de migrantes

El presidente de EE. UU., Donald Trump, culpó este viernes 5 de julio a la oposición demócrata del deterioro de las condiciones en los centros de detención para inmigrantes indocumentados en su país, pero dijo que casi todos funcionan "perfectamente" pese a los problemas revelados en un informe oficial.

Esta fotografía muestra a migrantes hacinados en el centro de detención en McAllen, Texas y fue captada por personal de la DHS. (Foto Presa Libre: Cortesía DHS)

Esta fotografía muestra a migrantes hacinados en el centro de detención en McAllen, Texas y fue captada por personal de la DHS. (Foto Presa Libre: Cortesía DHS)

“Los centros de detención están abarrotados porque los demócratas no quieren darnos ningún tipo de alivio respecto a las lagunas” en el sistema de inmigración, dijo Trump en declaraciones a periodistas en la Casa Blanca, antes de despegar hacia Bedminster, Nueva Jersey, para pasar el fin de semana.

Trump insistía así en su defensa de esos centros, que han recibido críticas a raíz de un informe gubernamental y de la visita esta semana a dos de ellos en Texas por parte de varios congresistas demócratas, entre ellos Alexandria Ocasio-Cortez y Joaquín Castro.

“He visto algunos de estos lugares y los gestionan perfectamente. Están limpios, están bien, hacen un gran trabajo”, afirmó Trump.

“Creo que ciertos miembros del Congreso han tratado muy mal a la Patrulla Fronteriza”, agregó en aparente referencia a Ocasio-Cortez y Castro.

Alegó que esos agentes migratorios “no están formados para ser médicos, enfermeros ni encargados de la limpieza”.

Como ya hizo en sus tuits el miércoles, Trump volvió a argumentar que la mejor solución al hacinamiento en los centros de detención es decir a los indocumentados “que no vengan, porque es ilegal”.

Malos tratos

Luego de su visita a los centros en Texas, Ocasio-Cortez denunció que varios inmigrantes detenidos se quejaron de recibir malos tratos por parte de sus guardianes, y de que muchos de ellos bebían agua de los inodoros por falta de acceso a otra fuente de hidratación.

Además, un informe de la oficina del Inspector General del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) advirtió esta semana de las condiciones de hacinamiento extremo, estancias largas y riesgos para la salud en los centros de la Patrulla Fronteriza en el sur de Texas.

Algunas organizaciones de abogados han lamentado, además, que los menores inmigrantes detenidos en Clint, Texas, permanecen en condiciones insalubres, sin pañales para los bebés, sin jabón, ropa limpia, cepillos de dientes, ni comida adecuada.

Preguntado por su amenaza de lanzar redadas masivas contra los indocumentados en el país a partir del pasado 4 de julio, Trump no se refirió a ninguna operación inminente, sino que dijo que esas actividades comenzarían “bastante pronto” y que en algunos casos ya han estado ocurriendo.

El pasado sábado, Trump aseguró que después del festivo por el Día de la Independencia, celebrado el jueves pasado, se deportaría a “grandes cantidades de personas” si no llegaba antes a un acuerdo con el Congreso estadounidense para reformar el sistema de asilo, algo que no ha sucedido.

A finales de junio pasado, Trump anunció que su Gobierno comenzaría redadas masivas contra familias indocumentadas en diez ciudades del país, pero finalmente afirmó que había decidido suspender la operación para dar una oportunidad a los demócratas de negociar con él sobre temas migratorios.