El conocido finiquito sirve para comprobar que los candidatos a un cargo público no han tenido ningún problema al administrar fondos públicos en caso que se hayan desempeñado como funcionarios.

El Tribunal Supremo Electoral exige que todos los que desean ser inscritos como candidatos a un cargo de elección popular deben tener la solvencia emitida por la Contraloría General de Cuentas, aunque no todos los candidatos tienen garantizada la emisión del documento.

El reto según el mismo contralor general de Cuentas Carlos Mencos, es garantizar que todos y cada uno de los aspirantes a un cargo público, sean probos y lo hayan demostrado con anterioridad, sin embargo algunos políticos que se les ha negado la emisión del finiquito han recurrido a acciones legales para que se garantice su inscripción, provocando una judicialización de procesos y que a la larga podrían comprometer el desempeño de los futuros funcionarios.

Esta tarde en el programa Decisión Libre, el contralor general de Cuentas Carlos Mencos, expone los retos a superar a 15 días de cerrar el proceso de inscripciones y con menos de la mitad de solicitudes de finiquitos recibidas.

Las últimas dos semanas serán un reto para la CGC y poder verificar, emitir y en algún caso negar la constancia transitoria de inexistencia de reclamos de cargos.