Robles aclaró que el trabajo de la comisión no es una excusa para pedir recursos al país del norte ni el Estatuto de Protección Temporal (TPS).
La comisión deberá buscar archivos y familiares de los pacientes para reconstruir aquellos acontecimientos que han generado indignación en el país, sin descartar a partir de los resultados se evalúe si procede una demanda.
El Gobierno informó que desde que Estados Unidos descubrió los hechos y presentó disculpas con Guatemala han surgido personas que dicen tener cierta información sobre los hechos.
En nombre de la salud, Estados Unidos infectó con sífilis, gonorrea y chancroides a casi 800 guatemaltecos, entre prostitutas, soldados y enfermos mentales, quienes, alentados por los médicos norteamericanos, habrían duplicado el número de contagios, según archivos oficiales.
Se cree que no todos recibieron tratamientos para sanear los males, cuyos estudios buscaban conocer si la penicilina era efectiva como medicina.
Guatemala y Estados Unidos no han señalado responsables de tales experimentos, pero la investigadora Susan Reverby, quien descubrió aquellas prácticas, lo asocia a que la ley guatemalteca lo permitía.
La comisión que investigará los hechos tendrá el apoyo de los Estados Unidos, según adelantó el presidente de aquel país, Barack Obama.
Con información de Geovanni Contreras