Las partes que integran este convenio se comprometen a desarrollar proyectos para investigar, divulgar, preservar y difundir la cultura del Caribe; además crearán mecanismos para promover la participación de comunidades en la toma de decisiones, la planificación, el desarrollo y los beneficios derivados de la actividad turística.
También deberán diseñar programas de investigación y desarrollo para promover la preservación, conservación, aprovechamiento y manejo sustentable de los espacios naturales; así como programas de educación, capacitación y concientización sobre el turismo sustentable para elevar el nivel de vida de las comunidades.
Deberán promover el desarrollo de sistemas de transportación aérea y marítima interregionales, que faciliten el desplazamiento de turistas.
Se creará un Comité Especial de Turismo Sustentable que tendrá a su cargo evaluar periódicamente el estado de la puesta en macha o desarrollo de la zona; determinar y establecer criterios y valores mínimos, regionales y uniformes para identificar y registrar como partes integrantes de la zona; entre otras funciones.
Los destinos turísticos se podrán categorizar de cuatro formas: comprometido; con grado mínimo de sustentabilidad, con grado medio de sustentabilidad y con grado superior de sustentabilidad.
Para determinar la categoría de los destinos se aplicará una evaluación periódica que tome aspectos de seguridad, identidad y cultura, acciones para erradicar la prostitución infantil, empleo turístico, calidad de los cuerpos de agua marino terrestre, calidad de agua para consumo humano, índice de consumo energético, índice de consumo de agua, uso y manejo ambiental, eficiencia del sistema de manejo de desechos sólidos, eficiencia del sistema de manejo de desechos líquidos, satisfacción del turista y el índice de consumo de productos nacionales y locales.