Guatemala

Presiones no influyen para derogar Ley de Vegetales

Pese a tres bloqueos en la ruta Interamericana, a la paralización comercial en Sololá y a la presión de dirigentes indígenas y de otra agrupación en el Congreso, diputados no se pusieron de acuerdo para derogar la Ley de Protección de Obtenciones Vegetales, con el argumento de que a la mayoría se les impedía el ingreso en el  Legislativo.

Miembros de  Udep, a quienes se vincula con Líder, queman llantas frente al Congreso, en rechazo a la Ley de Vegetales.

Miembros de Udep, a quienes se vincula con Líder, queman llantas frente al Congreso, en rechazo a la Ley de Vegetales.

Desde las primeras horas de la mañana comenzó la presión para derogar la normativa, que fue aprobada el pasado 10 de junio con 82 votos, ya que en cuatro buses amarillos llegaron al Congreso líderes de los 48 Cantones de Totonicapán y 72 alcaldes indígenas de Sololá, para reunirse con la Junta Directiva y jefes de bloques. Solo los recibieron diputados del Partido Patriota (PP).

“Queremos que se derogue la Ley Monsanto, de lo contrario  mañana —hoy— se incrementarán los bloqueos en todo el país, hasta que sea eliminada”, manifestó Alberto Chumil, representante de los alcaldes indígenas.

Joaquín Ordóñez, de los 48 Cantones, repetía que no saldrán del Congreso hasta que la Ley de Vegetales sea eliminada.

También fueron movilizados en otros buses amarillos miembros de la Unidad Defensora del Pueblo (Udep), a quienes  diputados del PP vinculan con el opositor Libertad Democrática Renovada (Líder). Los manifestantes comenzaron el bloqueo para impedir el ingreso al Congreso a las 13.30 horas.

Ausencia

Luego de casi 90 minutos de espera y bajo la mirada vigilante de las autoridades indígenas, el presidente del Congreso, Arístides Crespo, inició la plenaria con quórum reducido de 40 diputados, ya que el resto denunciaba el bloqueo de las puertas y lanzamiento de tomates.

 En ese momento en el hemiciclo se le dio trámite a la iniciativa del Presupuesto General para el 2015, que fue trasladada a comisión para su aval.
Luego,  y aunque faltaban 117 diputados, el oficialista Iván Arévalo presentó una moción verbal para que al lograr el quórum se derogara la Ley de Vegetales, a pesar de que la semana pasada el PP rechazaba esa idea porque en esa normativa figura la ampliación por Q550 millones para el Ministerio de Comunicaciones.

Mientras el Congreso seguía bloqueado, diputados, en su mayoría del PP, se dirigieron a las autoridades indígenas y de los 48 Cantones, quienes estaban ubicados en el palco, y reconocieron que fue un error haber aprobado la Ley de Vegetales.

Aunque se hacían promesas para derogar la norma, diputados de Compromiso, Renovación y Orden, Líder, la mayoría del bloque Todos y gran parte de los oficialistas estaban ausentes.

Ante esa situación, legisladores independientes rumoraban que las manifestaciones eran una estrategia del PP y Líder para distraer la atención mientras incluyen o avanzan en temas que les convienen, como la aprobación de los Q4 mil millones en bonos y el Presupuesto.

Para despejar la salida los diputados lograron un “acuerdo político” con las autoridades indígenas  para derogar la ley. La discusión continuará hoy por la tarde en el Congreso.

Bloqueos

Unas 40 mil personas  bloquearon ayer, de las 10 a las 18 horas,  tres puntos  de la ruta Interamericana, en el kilómetro 117, Las Trampas; 127, Los Encuentros, y 130,  Xajaxac, Sololá, así como otros tramos de ese departamento, para exigirle al Congreso la derogación de la Ley de Vegetales, por considerarla perjudicial.

Además, piden una rebaja en el precio de los servicios que presta el Registro Nacional de las Personas,  contra la minería y la aprobación de la ley de desarrollo rural, que se reconozcan las consultas comunitarias y que el Ministerio de Educación reduzca los requisitos de los programas escolares.

Según Chumil, organizaron las protestas porque en reuniones les informaron de efectos negativos de la ley en la agricultura.-Colaboraron: E. Saénz; J. Rosales y A. Julajuj.

Temores
 
Varias son las dudas de la población contra la Ley de Vegetales.

Argumentan que  se privatizarán las semillas de alimentos esenciales, lo que incrementará la crisis alimentaria.

Temen  que  se obligue al uso de transgénicos, los que consideran perjudiciales.

Además, denuncian  que se criminalizaría al campesino cuando sus plantaciones sean contaminadas con las semillas registradas.

En un  campo pagado, Monsanto rechaza que esa empresa haya promovido dicha ley, porque es respetuosa de la independencia del Congreso, y asegura que se  dedica a proteger el derecho intelectual.