Internacional

Animales de los zoológicos reciben vacunas experimentales contra el coronavirus

Las primeros en participar en el estudio científico son especies de un recinto en California, Estados Unidos.

|

Una fotografía facilitada por Zoetis y el Zoológico de Oakland muestra a un miembro del personal del zoológico administrando a un hurón la vacuna experimental contra el COVID-19. (Foto Prensa Libre: Zoetis/Oakland Zoo vía The New York Times)

Una fotografía facilitada por Zoetis y el Zoológico de Oakland muestra a un miembro del personal del zoológico administrando a un hurón la vacuna experimental contra el COVID-19. (Foto Prensa Libre: Zoetis/Oakland Zoo vía The New York Times)

El Zoológico de Oakland Zoo en California empezó esta semana con osos, pumas, tigres y hurones, los primeros de unos 100 animales que se espera recibirán una vacuna experimental contra el covid-19 este verano.

Zoetis, una compañía de farmacología veterinaria, está donando 11 mil dosis de la vacuna a unos 70 zoológicos y santuarios, universidades y otros centros de conservación en 27 estados de Estados Unidos, y el Zoológico de Oakland es uno de los primeros en beneficiarse. La vacuna es de uso exclusivo para animales, tiene un proceso de aprobación diferente al de las vacunas para personas y no puede aplicarse para proteger a los humanos.

“Se traduce en mucha más seguridad para nuestros hermosos animales”, afirmó Alex Herman, vicepresidenta de servicios veterinarios en el Zoológico de Oakland. “Nuestros primeros animales en recibir la vacuna en el zoológico fueron dos de nuestros tigres hermosos y mayores”.

El Zoológico de Oakland no ha tenido ningún caso de animales infectados de SARS-CoV-2, el virus que causa el covid-19 en humanos. Pero el zoológico ha tomado precauciones extraordinarias, comentó Herman, al pedirle a los cuidadores que mantengan una sana distancia de los animales y que usen equipo de protección.

Sin embargo, felinos de gran tamaño y otros animales vulnerables como los gorilas se han infectado en zoológicos de Estados Unidos y otras partes. En febrero, el Zoológico de San Diego inmunizó a simios con la vacuna Zoetis, que se probó primero en visones.

La compañía, con sede en Nueva Jersey, también les ha proporcionado la misma vacuna experimental a granjas de peletería en Oregón luego de que en la primavera el estado dispusiera que todos los visones en granjas debían ser vacunados. El Departamento de Agricultura de Estados Unidos (Usda, por su sigla en inglés) ha aprobado la vacuna para uso experimental “en función de cada caso”, según Christina Lood, directora de comunicaciones de Zoetis.

La donación de la vacuna es el último avance en la reacción accidentada que se ha presentado ante los animales infectados por el virus.

Desde el inicio de la pandemia, los dueños de mascotas, encargados de zoológicos, granjeros de peletería y científicos han tenido sus propias preocupaciones diferenciadas sobre el contagio en animales. A los dueños de mascotas les ha preocupado la salud de sus queridos perros o gatos, mientras que los investigadores y funcionarios de salud pública han advertido que algunas especies animales, ya sean domésticos o salvajes, podrían convertirse en un reservorio donde el virus puede vivir y mutar aunque el mundo intente erradicarlo en las personas.

Los contagios en granjas de peletería danesas hicieron que Dinamarca sacrificara toda su población de visones, unos 17 millones de especímenes. Rusia aprobó una vacuna para visones y otros animales, y al parecer ha comenzado a vacunar perros y gatos.

El Usda no ha considerado ninguna vacuna para perros o gatos, y de manera insistente los veterinarios han dicho que no hay evidencia de que las mascotas transmitan el virus a los humanos. Sin embargo, el virus sí se transmitió de visones criados en granjas a humanos.

No obstante, los científicos han seguido encontrando que los dueños sí pueden contagiar a sus mascotas perros o gatos. Estos últimos son más susceptibles y, aunque la mayoría presenta síntomas leves, varios estudios han informado de gatos con síntomas graves. Un gato en Reino Unido tuvo que ser sacrificado.

Dorothee Bienzle, veterinaria e inmunóloga en la Universidad de Guelph, en Ontario, Canadá, quien hace poco terminó un estudio de perros y gatos que viven en hogares con humanos infectados de covid, encontró varios casos de gatos con sintomatología grave. Pero dijo que para atribuir con certeza los síntomas al coronavirus, habría que excluir todas las demás enfermedades; eso no fue posible en su estudio, que dependía de muestras de sangre y de las descripciones de los síntomas por parte de los dueños.

Karen Terio, veterinaria y patóloga de la facultad de veterinaria en la Universidad de Illinois campus Urbana-Champaign, se hizo eco de esa experiencia: “He escuchado de gatos con síntomas clínicos graves, pero no he visto ningún caso en el que se pudiera confirmar que los síntomas se debían al SARS-CoV-2”.

En la reciente reunión en línea del Congreso Europeo de Microbiología Clínica y Enfermedades Infecciosas, Bienzle presentó los resultados preliminares de la investigación que ella y sus colegas habían realizado.

Los primeros gatos y perros que estudiaron fueron los que vivían en hogares en los que algún humano había dado positivo por el coronavirus. “Nos enfocamos en una población que tenía probabilidades de dar positivo”, sostuvo Bienzle.

Como era de esperar, encontraron que más gatos que perros dieron positivo: 67 por ciento contra un 43 por ciento. Además, respecto a los gatos, el tiempo que pasaban con los dueños, sobre todo si dormían en la misma cama, aumentaba sus probabilidades de contagio, lo cual no fue cierto en el caso de los perros.

A continuación, los investigadores analizaron a gatos admitidos en refugios y gatos que habían llevado a clínicas de bajo costo para esterilización. Estos gatos, de los que no se tenía información de que hubieran convivido con humanos infectados, tenían una incidencia de infección notablemente menor, un nueve por ciento para los gatos de los refugios y solo un tres por ciento para los que se habían llevado a las clínicas.

Bienzle dijo que los consejos para los dueños de mascotas han sido los mismos durante toda la pandemia. Si tienes covid, debes aislarte de tus mascotas como lo harías de un humano. Ni Estados Unidos ni Canadá apoyan la vacunación de las mascotas. Bienzle dijo que la transmisión humana a los animales podría evitarse con una sana distancia y mascarillas.

Los investigadores de los santuarios y quienes trabajan con especies vulnerables como los murciélagos han adoptado medidas más estrictas para proteger a los animales del contagio.

Para los zoológicos, la pregunta no es si vacunar, sino cómo tratar al paciente si este es un tigre. “Con mucho refuerzo positivo”, explicó Herman. El zoológico entrena a sus animales dándoles recompensas para que se presenten de manera voluntaria a ser inyectados. Es más o menos la misma idea que la de recibir una paleta después de una inyección, aunque los animales parecen más dispuestos a ir de modo voluntario que los humanos.

“El tigre se recarga en la valla”, dice Herman. “El oso pardo de mil kilos se recarga en la valla”.

Buen tigre. Buen oso.