Como resultado, “la urna del siglo III antes de nuestra era que contenía sus cenizas resultó seriamente dañada”, añadió la policía, que abrió una investigación.
“Fue un acto despreciable de un ladrón desalmado”, dijo el detective Daniel Candler, según el comunicado.
“Dejando de lado el valor financiero de la urna irreemplazable y el significado histórico” de Freud, “el hecho de que alguien pretenda robar un objeto sabiendo que contiene los últimos restos de una persona es increíble”, agregó Candler, pidiendo colaboración ciudadana para resolver el caso.
Freud murió en Londres en 1939 a los 83 años. El autor de “La interpretación de los sueños” y “El malestar en la cultura”, de origen judío, había llegado de Viena a Inglaterra un año antes, en 1938, después de la anexión de Austria por la Alemania nazi.
Su mujer Martha murió doce años más tarde, en 1951, también en Londres.