La medida implica que los medios no están exentos del debate sobre la violencia, pero también indica que la Casa Blanca no hará que Hollywood, las cadenas de televisión y las empresas de videojuegos sean una parte principal de él.
Aunque el plan presidencial sí mencionó a los medios de comunicación, dijo que cualquier esfuerzo estará enfocado en el sistema de clasificación de contenidos y la tecnología. “La rama del entretenimiento y los videojuegos tienen la responsabilidad de darle a los padres herramientas y opciones sobre las películas y los programas que sus hijos ven y los juegos que juegan”, expresó.
Desde que 20 niños y seis adultos fueron asesinados en una escuela de Newtown, Connecticut, en diciembre último, algunos han pedido que haya cambios en el sector del entretenimiento, que suele promover videojuegos de disparos con armas de fuego, programas estelares escabrosos y películas comerciales muy violentas.