El mandatario agregó que, con una mayor capacidad, la Fuerza Armada seguirá siendo garantía de paz y “columna vertebral de la independencia y soberanía de esta tierra venezolana”.

Maduro juramentó a los jefes de las cuatro fuerzas militares y la Milicia Nacional y al ratificado ministro de Defensa, general Vladimir Padrino.

Afirmó que el país es acosado por “focos violentos”, pero se encuentra en paz, al tiempo que insistió en acusar al líder legislativo Julio Borges de entregarle armas a los manifestantes que “atacan” a las instituciones militares.

Maduro instó al nuevo jefe del Comando Estratégico Operacional de la Fuerza Armada, almirante Remigio Ceballos, a apoyar los cuerpos encargados de mantener el orden público.

El presidente despidió con agradecimientos al mayor general Antonio Benavides como jefe de la Guardia Nacional (policía militarizada), que carga con el mayor peso en las tareas de represión de las protestas.

“Los hombres se prueban en las dificultades, sus valores, su compromiso, su lealtad, usted se ha crecido. Qué duro ha sido, con grupos violentos que utilizan muchachos. La Guardia Nacional ha sido contención de paz”, afirmó.

Maduro reiteró que ha prohibido el uso de armas de fuego en el control de manifestaciones, luego que esta semana murieran dos jóvenes de 17 y 22 años de balazos disparados por soldados.

El nuevo jefe de la Guardia Nacional será el mayor general Sergio Rivero. Maduro también juramentó al nuevo jefe del Ejército, Jesús Suárez; de la Aviación, Iván Hidalgo, y al de la Marina, almirante Edglis Herrera.

Durante la jornada, la oposición realizó una protesta de dos horas durante las cuales bloqueó el paso en vías principales de tránsito, lo que desató nuevos episodios de represión con gases lacrimógenos y perdigones, lo que dejó al menos cinco heridos.

Con la protesta, la oposición quiso repudiar la muerte el jueves del joven de 22 años que falleció de un tiro disparado desde una base aérea en el este de Caracas.

La protesta se concentró en los alrededores de la base aérea Francisco de Mirada, con los manifestantes golpeando las rejas de protección y objetos metálicos, acompañando un cacerolazo desde la vecina autopista Francisco Fajardo. Además dejaron pancartas con mensajes de repudió a los militares.

Las protestas comenzaron el 4 de abril, luego de que la Asamblea Nacional (Congreso), de mayoría opositora, acusara al Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de haber perpetrado un golpe de Estado con dos sentencias que la despojaron de sus funciones legales.

Padre de joven asesinado dice fue jefe de Maduro y pide justicia

David Vallenilla, el padre del joven con el mismo nombre que falleció este jueves por disparos a quemarropa por parte de agentes de seguridad durante una protesta opositora en Caracas, aseguró hoy que fue jefe del actual presidente, Nicolás Maduro, y pidió que la muerte de su hijo no quede impune.

“Yo quiero que esto no quede así nada más, Nicolás, por favor. No era malandro (delincuente), era un estudiante graduado. Hoy entregaba su dinero para el paquete de su graduación. Nicolás, por favor, (soy) David Vallenilla, fui tu jefe” , dijo a los medios desde la morgue en la que se encontraba el cuerpo de su hijo en Caracas.

Vallenilla aseguró que trabajó en el Metro de Caracas con el presidente venezolano, y que Maduro conoció a su hijo, hoy muerto, cuando este era pequeño.

También destacó que “es claro que hubo una agresión directa contra David José”  y enfatizó en que el joven, su único hijo, no era un delincuente.

“Por favor, Nicolás, (…) por favor, amigo, yo te digo que eres mi amigo porque yo te respeto, porque tú eras una persona muy centrada (…). Está en tus manos ayudar a que esto quede claro. Y no era malandro, era mi único hijo” , dijo Vallenilla con voz entrecortada.

Este jueves, David Vallenilla, de 22 años, murió tras recibir disparos a quemarropa por parte de un agente de las fuerzas armadas de Venezuela durante una manifestación opositora en la autopista Francisco Fajardo, la principal arteria vial de Caracas, constató Efe e informó el Ministerio Público.

El agente disparó al menos dos veces con un fusil empleado para lanzar perdigones a escasa distancia de la víctima, desde el interior de la base aérea militar de La Carlota  (colindante a la autopista) .

En ese lugar se registraban en ese momento enfrentamientos entre grupos de manifestantes y los agentes policiales después de que una protesta antigubernamental, en la que participaban cientos de opositores, fuese dispersada con gases lacrimógenos y perdigones.

Con la muerte de Vallenilla, la Fiscalía contabiliza 75 víctimas mortales durante la ola de protestas que inició hace casi tres meses en la nación petrolera.