Liberal sin neo
Con una grúa
Las prioridades están mal alineadas
Los puertos marítimos son vitales a la economía del país; se lee y escucha hablar sobre ellos, aunque para la mayoría de personas son remotos y pasan desapercibidos. Cuando figuran en las noticias, los puertos usualmente van asociados con palabras como crisis, bloqueos, sindicato, grúas y ocasionalmente, corrupción. Guatemala cuenta con cinco puertos marítimos internacionales que al descontar Champerico que no figura y Puerto San José de poca importancia, quedan tres.; Puerto Barrios y Santo Tomás de Castilla en el Caribe, y Puerto Quetzal en el océano Pacífico.
Funcionarios y sindicalistas zafan bulto y culpan a la empresa contratada.
Los datos que se presentan a continuación provienen del Informe Estadístico Portuario 2023 (Comisión Portuaria Nacional, abril, 2024).
La importancia de los puertos para el comercio exterior del país resalta por el hecho que, en términos de peso, casi tres cuartas partes de los productos y mercancías egresan e ingresan por puertos marítimos. En 2023, las exportaciones e importaciones del país, por tipo de puerto en millones de toneladas (MT) fueron; puertos marítimos 26.2 MT (73.3%), puertos terrestres 9.5 MT (26.5%) y puertos aéreos 0.6 MT (0.17%). Por peso, se mueve 2.8 veces más comercio exterior por vía marítima que por terrestre y 43.5 veces más que por aérea.
La estructura del comercio exterior varía al medirla con base a valor (2023, en miles de millones de US$) por tipo de puerto; puertos marítimos $27.6 (62%), puertos terrestres $13.2 (30%) y puertos aéreos $3.8 (8%). En términos de valor, casi dos tercios del comercio exterior se transporta por vía marítima, poco menos de un tercio por terrestre y menos de 1 de cada $10 por vía aérea.
El movimiento del comercio exterior por puerto marítimo en 2023, en millones de toneladas (MT) fue; Puerto Quetzal 16.9 MT (65%), Puerto Santo Tomás 5.8 MT (22%) y Puerto Barrios 3.4 MT (13%). En términos de peso más de dos tercios del comercio exterior por transporte marítimo se mueve por el Pacífico y menos de un tercio por el Atlántico; por Puerto Quetzal ingresan y egresan más productos y mercancías que por Santo Tomás y Puerto Barrios juntos. Medido en términos de valor en miles de millones de US$, el comercio exterior pasa por Puerto Quetzal $15.1 (55%), Santo Tomás $7.5 (27%) y Puerto Barrios $4.8 (18%).
Un reportaje en PL el pasado lunes se titula “Grúas generan la mayoría de atrasos en portuaria”; de cinco supuestas grúas, solo una funciona. “Las demoras en la carga y descarga de buques pueden extenderse hasta 45 días”. Puerto Quetzal es administrado por la Empresa Portuaria Quetzal, empresa estatal con autoridades nombradas por el presidente. Autoriza a particulares a prestar ciertos servicios, como las grúas, con tarifas fijadas por la EPQ y aprobadas por acuerdo gubernativo. En un puerto manejado por el estado, que procesa 65% del peso del comercio exterior por vía marítima, funciona tan solo una grúa; increíble, parece novela de García Márquez. Funcionarios y sindicalistas zafan bulto y culpan a la empresa contratada para el servicio de grúas.
Tanto que se habla de la posición privilegiada del país, de su gente y clima, costas en dos mares, las posibilidades de nearshoring y friendshoring y ser imán para la inversión extranjera; solo funciona una grúa en Puerto Quetzal, sin habar de la autopista.
Las prioridades están mal alineadas. Guatemala podría tener magníficos puertos con tecnología de punta y constituirse en un nervio logístico regional sirviendo al mundo, sin que le costara un centavo al gobierno y a los contribuyentes. Con tantas necesidades y oportunidades ¿Qué hace un gobierno administrando puertos?