MIRADOR
Se abrió paca: las ofertas populistas
Prepárese porque llegan las ofertas navideño-electorales. Ya hay candidatos, algunos suspendidos por el Tribunal Supremo Electoral, que les prometen el paraíso en la tierra, a la espera de que los voten creyéndose las mamarrachadas que les aseguran.
El Presidente incrementó un 10% el monto total de las pensiones de los beneficiados del Régimen de Clases Pasivas del Estado. Es evidente que con la euforia de quienes se ven favorecidos pretende animar el voto venidero y genera una suerte de clientelismo, al margen del beneficio que pueda suponer para grupos mal pensionado. El debate no es sobre la cantidad ni en relación con el apoyo que representa, sino el momento oportunista de hacerlo.
Por su parte, el suspendido Roberto Arzú se despacha en sus redes así: “Con solo 377 quetzales al mes, la casa digna que tantos (sic) has soñado, será tuya”. Suponiendo que la tal casa no tenga los remiendos de la frase, hay que hacer números para ver qué ofrece. Si usted paga Q377 mensuales —como le propone— y lo hace durante 30 años, a una tasa de interés del 4% —algo inaudito en Guatemala—, podrá aspirar a una vivienda de Q80 mil al precio actual ¡Algo así como aquellas famosas casas Baldetti! No nos detengamos mucho en analizar el porcentaje de interés ni hablemos de que seguramente no dispondrá del enganche o de otras cuestiones, salvo que el Estado “se lo pague todo” a costa de otros que suele ser la fórmula mágica de algunos. Desconozco si ese tipo de vivienda será su sueño y aspiración —como indica—, pero sería bueno que el aspirante Arzú nos informara del lugar en que vive y si está dispuesto a adquirir una de sus “ofertas” para él y su familia, tal y como ofrece a los votantes.
' Si se deja engañar es porque usted quiere, porque no presta atención ni analiza, o quizá porque cierra los ojos a una realidad imperante.
Pedro Trujillo
La tercera pata del banco la puso el partido Semilla con su propuesta de sacar al Cacif de las representaciones que le otorga la Constitución —una—, y otras leyes. La justificación fue que hay que terminar con el corporativismo de ciertos grupos —lo que puedo compartir—, pero se olvidó mencionar que quien más representaciones constitucionales tiene es la Usac —a la que no aludió cuidándose las espaldas del enojo de sus egresados— ni tampoco criticó y comentó el mayor corporativismo de otras instancias: ejército, jueces, colegio de abogados, bancos y otros diversos grupos. Es decir, no ponía sobre la mesa el corporativismo tal y como pretendían hacer ver, sino el Cacif grupo que sirve de escudo ideológico para cierto sector político y que genera las pasiones electorales que buscan quienes interesadamente lo utilizan.
El último personaje por citar es el “doctor” Baldizón. En sus redes —en tercera persona, como los grandes— dice: “El Dr Manuel Baldizón, planificó e invirtió su tiempo y esfuerzo en buscar el desarrollo y empleo para nuestro pueblo a través de la industria de turismo, la cual es hoy en día una gran fuente de ingreso y divisas para Guatemala, generando empleo y desarrollo”. Olvida el don —y pretende que olvidemos los demás— su condena en USA por lavado de dinero, aunque explicará que lo hizo por “el bien del país, de los guatemaltecos y de las personas de la tercera edad” de las que “tanto se preocupaba” mientras blanqueaba dinero mal habido ¡Qué canalla y desvergonzado!
Así que ya sabe, si se deja engañar es porque usted quiere, porque no presta atención ni analiza, o quizá porque cierra los ojos a una realidad imperante: la proliferación de políticos mañosos y embusteros que se encuentran en todo el espectro político.