EDITORIAL

La lectura siempre libera

A pesar de los avances tecnológicos, la explosión de las redes sociales y la amplia oferta de información y entretenimiento por medios audiovisuales, ninguna forma de compartir información supera las cualidades formativas, creativas y didácticas de la lectura, debido a que este proceso de asimilación de datos por el intelecto involucra complejos sistemas de análisis, evocación y memoria por parte de cada persona.

Es por ello que el incentivo de la lectura, no solo de textos referenciales sino sobre todo de obras literarias en diversos géneros constituye una de las experiencias más gratificantes y enriquecedoras, puesto que amplía el acervo, pero a la vez potencia la generación de ideas y estimula el pensamiento abstracto, facultad clave para contar con un espíritu analítico y propositivo como el que se necesita frente a los dramáticos retos que afronta Guatemala.

La apertura de una nueva Feria Internacional del Libro expone lo más reciente de la creación de autores nacionales y extranjeros, consagrados o noveles, que demuestran las inagotables posibilidades de la narrativa, la poesía, el ensayo, el relato histórico, la investigación social, la literatura infantil y juvenil, sin dejar fuera la enseñanza de los grandes clásicos, desde los maestros grecolatinos hasta los deslumbrantes universos creados por autores del llamado Boom Latinoamericano, cuya vigencia es sorprendente.

A pesar de las peroratas de sucesivos gobiernos acerca de los grandes valores guatemaltecos, aún es muy pobre la inversión efectuada para editar la obra de nuevos talentos y difundir a gran escala, sobre todo entre estudiantes de primaria y secundaria de institutos públicos, la huella, entre otros, de Luis Cardoza y Aragón, Augusto Monterroso, César Brañas, Virgilio Rodríguez Macal, Isabel de los Ángeles Ruano, Luz Méndez de la Vega, Humberto Akábal, Rafael Arévalo Martinez y por supuesto Miguel Ángel Asturias, a quien está dedicada la Filgua 2017, por el cincuentenario del Nobel de Literatura.

El país atraviesa por una crisis de liderazgo político que en buena medida se debe a la falta de formación humanística de diversos dirigentes, que podrían encontrar en la lectura un mejor aliado para el diálogo constructivo y la toma de decisiones.

Las evaluaciones de graduados de diversificado en los últimos años arrojan resultados preocupantes en materia de lenguaje y comprensión, lo cual se debe en buena medida a deficientes hábitos de lectura que se cultivan desde la niñez.

Actividades como esta le dan un decidido impulso a la industria editorial y de distribución de libros, que a pesar de las amplias ventajas de los formatos digitales, lejos de decaer ha tenido un repunte debido a la versatilidad del medio impreso.

Lamentablemente no en todas partes hay aprecio por el valor que representan las ferias del Libro, como tristemente lo demostró la alcaldesa de Antigua Guatemala, quien bajo diversos pretextos ha puesto barreras para que se lleve a cabo la edición de este año en el Parque Central de dicha localidad.

ESCRITO POR:

ARCHIVADO EN: