EDITORIAL
Primer buen paso de la investigación
La captura de dos hombres, acusados de ser los asesinos de nuestro corresponsal Danilo López y de Federico Salazar, de Radio Nuevo Mundo, y de haber herido gravemente a Marvin Túnchez, demuestra que para las autoridades policiales es posible lograr éxitos en tiempo muy corto cuando se tiene el deseo de hacerlo, y que el sistema judicial también tiene la oportunidad de funcionar cuando emite rápidamente las órdenes de captura necesarias.
Sin embargo, ya comenzaron las acciones dilatorias que permite el sistema judicial. Quien fue capturado al día siguiente del crimen rechazó al abogado de oficio que lo defendería y solicitó uno propio, lo que abre la sospecha de que sus honorarios serán pagados por gente relacionada con los autores intelectuales. Ayer fue apresado en Champerico uno de los acusados, quien pocos momentos después del alevoso asesinato se dirigió a la casa del alcalde mazateco para refugiarse, según relataron algunos testigos.
Hay casos que se convierten en emblemáticos porque colman la paciencia y rompen la desatención ciudadana derivada del largo tiempo que tardan los juicios y del exceso absurdo de amparos. Esto, en la práctica, ocasiona que las víctimas o sus familiares, según sea la situación, se decepcionen, se cansen y abandonen los casos, lo que propicia la impunidad y puede provocar que los ciudadanos busquen justicia precisamente con el sicariato, que a su vez se incrementa debido a la certeza de que nada se resuelve.
El Organismo Judicial tiene ahora en sus manos la posibilidad de vigilar todo lo relacionado con este caso y, de hecho, con algún otro, causante de particular interés entre la ciudadanía. La constante falla de los juicios, a causa de toda clase de errores, veredictos incomprensibles y demás, hace que cuando un caso tiene posibilidades de lograr justicia pronta, obviamente sin arrebato alguno, deba ser aprovechado para que comience a despertarse la confianza entre la ciudadanía en cuanto a que es posible lograr resoluciones satisfactorias para las víctimas.
La gravedad de que dos periodistas puedan ser asesinados en un parque central, al mediodía, y otro quede malherido, constituye un hecho que es motivo de rechazo generalizado en las instituciones globales de prensa, varias de las cuales ya se pronunciaron, entre ellas la Asociación Mundial de Periódicos, la Sociedad Interamericana de Prensa, así como las que vigilan el cumplimiento de los derechos humanos. Otra vez, Guatemala es el centro de noticias lamentables, que reflejan la gravedad de la situación que afronta el país.
La vigilancia respecto de cuándo comienza el juicio, cómo se desarrolla y cómo actúan fiscales y defensores también debe ser realizada por entidades periodísticas y personas interesadas en el fortalecimiento del sistema de seguridad y justicia. La tragedia del martes puede ser la gota que rebalse el vaso y por ello es que surgen importantes acciones como las emprendidas en las últimas horas por las fuerzas de seguridad, las cuales deben tener correspondencia con el sistema judicial, para que a la vez se den pasos en contra de la impunidad rampante.