CATALEJO
Sugerencias de cambios a la LEPP
AYER SE REALIZÓ UN foro sobre las reformas a la Ley Electoral y de Partidos Políticos, organizado por la Fundación Esquipulas, con la presencia de expertos y autoridades del Tribunal Supremo Electoral, quienes expusieron sus criterios, por cierto muy parecidos. El orador principal fue Daniel Zovatto, experto en reformas políticas y electorales, con experiencia acerca del caso de Guatemala por muchos años, casi 30, si mal no recuerdo. Durante 20 minutos hizo una interesante y muy clara exposición de sus criterios al respecto. Mi meta es presentar un apretado resumen de algunas de las ideas, expresadas no necesariamente en el orden de su exposición. Estoy de acuerdo con esos criterios y espero reproducirlos con corrección.
SE DEBE TOMAR en cuenta el cambio actual en América Latina y en Guatemala: el cambio de ciudadano elector a ciudadano vigilante entre cada elección. A los políticos les será más difícil mantener el poder. Las demandas populares son cada vez más complejas; habrá crisis de gobernabilidad porque el proceso ciudadano es brutal y fundamental para fortalecer las instituciones. Estas crisis son las mejores parteras de los cambios. Porque las reformas se deben realizar por medio del Congreso, a los diputados se les debe hablar y gritar más alto y más cerca del oído, para lo cual los actuales gritos del parque deben trasladarse al parlamento, porque si la democracia no tiene rival como sistema político, debe solidificar sus instituciones.
ESTO NO ES NADA NUEvo, ni revolucionario. Las leyes de transparencia entraron al paisaje político en el siglo XVII. Pero se le debe poner el ojo al mundo de los negocios, a quienes financian a la dirigencia política. Se debe seguir al dinero: es como el agua, porque busca un nuevo curso. Se necesita un Tribunal Supremo Electoral cuyas decisiones no puedan ser apeladas ni amparadas. En Guatemala es difícil porque sus instituciones son débiles y por eso se debe fortalecerlas. Este tribunal debe tener dientes, y deseo de morder (Nota: no lo dice en el sentido de corrupción, como se conoce en Guatemala, sino como la decisión de fuerza, como la del perro guardián). El Congreso debe aprobar las reformas, pero el TSE tiene la tarea de guiarlas.
LOS GUATEMALTECOS, al salir a las calles, dijeron “basta”. Es el principio del fin de la impunidad. Por eso los partidos infractores —campañas anticipadas— deben ser suspendidos. Las curules no deben ser de los diputados y por eso los tránsfugas podrán ir presos o quedar aislados. Lo mismo debe ocurrir con los testaferros, y quienes se presten a burlar la ley. Además, no se deben aceptar estrategias dilatorias. Las reformas deben ser ahora, pero no ser una carta a Santa Claus, sino seleccionar aquellos temas urgentes porque si no se cambian, lo demás tampoco cambiará. La reforma debe ser como la acupuntura: llegar a centros neurálgicos y no hacer reformas malas porque se les dará excusa a quienes no las querían. (El subrayado es mío).
A MI JUICIO, LO URGEN- te debe ceder el paso a lo importante. Las elecciones están a solo 95 días, y los cambios deben ser decididos para aplicarlos en este proceso. Es fácil lograrlo si se escoge lo urgente y se deja abierta la puerta para preparar los otros cambios necesarios. Como expresó Zovatto, los movimientos sociales tienen fecha de vencimiento y no se debe perder la gran oportunidad iniciada desde el 16 de abril, fecha del inicio de un cambio muy relacionado con el promedio de edad de la población adulta. Los políticos abusaron y hastiaron a la sociedad. Ahora, si desean tener prestigio, necesitan actuar de inmediato y sin componendas. La Historia, mientras tanto, vigila.