Cursó la primaria gracias a la ayuda de los sacerdotes de la orden Maryknoll, y los básicos, por los misioneros benedictinos de Sololá. Luego se graduó de maestro de educación primaria en el Instituto Indígena Santiago, con los Hermanos de La Salle. Después de una serie de acontecimientos, estudió Antropología en la Universidad Bucknell, en Pensilvania. Le siguió una maestría en la Universidad del Estado de Nueva York y un doctorado en Connecticut, todo en la misma rama.
En la actualidad imparte cátedra de Estudios Nativos Americanos en la Universidad de California en Davis.
Tocado por la guerra
Montejo fue maestro de primaria en su natal Jacaltenango, pero la guerra interna, como a muchos otros guatemaltecos, le afectó. En su caso, se vio obligado a colaborar con las Patrullas de Autodefensa Civil. Si no participaba, lo podían matar, pues el que no lo hacía, era sospechoso de colaborar con la guerrilla.
Aquella situación duró entre julio de 1981 y noviembre de 1982, cuando tuvo la oportunidad de exiliarse en Estados Unidos, gracias a las gestiones de su amigo Wallace Kausman, un escritor estadounidense.
Llegó a Carolina del Norte, donde se dedicó a traducir un libro de cuentos que había escrito en su etapa docente. Al terminar su permiso, regresó a un campo de refugiados en México, donde estaban sus padres, porque la aldea donde vivía fue arrasada por el Ejército de Guatemala.
Luego regresó a EE. UU. con un permiso especial, desempeñándose como escritor. Para 1984, había logrado llevarse consigo a su familia.
Al final de la guerra, se involucró en la política. “En Guatemala, lamentablemente, los políticos no son académicos. Solo se meten a un partido y movilizan gente; eso es todo”, refirió hace siete años.
El escritor
Montejo se expresó bastante con su poesía de resistencia. Por eso lo acusaron de ser uno de los entrenadores intelectuales de la guerrilla. En esa ocasión, los soldados lo llevaron amarrado a un destacamento militar, donde una noche lo torturaron. Todo esto lo escribió meses después. Lo compiló en el libro Testimonio, muerte de una comunidad maya, publicado en 1987 y que fue traducido a varios idiomas.
El autor también ha escrito obras en inglés, tales como The Bird Who Cleans the World and Other Mayan Fables (1991); el poemario Sculpted Stones (1996), en edición bilingüe inglés/español; la novela Las aventuras de míster Puttison entre los mayas (1998); una traducción del Popol Vuh: libro sagrado de los mayas (1999); Voces del exilio: La violencia y la supervivencia en la historia moderna maya (1999); El Q’anil: El hombre rayo (2002), en edición bilingüe inglés/español; y Renacimiento intelectual maya: Ensayos críticos sobre la identidad, representación y liderazgo (2003).