Revista D

Parque Navidad, el jardín al sur de la ciudad.

El área que comparten los edificios del Seguro Social y la Municipalidad fue un espacio verde denominado Parque Navidad.  

Panorámica del desaparecido parque. En la actualidad en el lugar está la sede del Seguro Social. (Foto: Museo Nacional de Historia).

Panorámica del desaparecido parque. En la actualidad en el lugar está la sede del Seguro Social. (Foto: Museo Nacional de Historia).

A finales de la década de 1890 tuvo lugar en Guatemala la Exposición Centroamericana, una feria que mostró la materia prima de varias naciones productoras, y la tecnología de otras industrializadas.
“Todos los países de Centroamérica aceptaron la invitación que Guatemala les hizo para participar. También lo hicieron otros de América y de Europa: Alemania, Bélgica, Chile, Estados Unidos, Francia, Gran Bretaña, Italia, México, Colombia y Rusia. En total, 15 países de América y Europa instalaron sus pabellones. Guatemala montó varias exhibiciones”, detalla la historiadora María Lorena Castellanos Rodríguez en su investigación Exposición Centroamericana de 1897.
El evento sucedió durante el período presidencial de José María Reina Barrios, quien destinó un terreno de la actual zona 4 de la capital como recinto para la feria, al que posteriormente se la llamó Cantón Exposición. El último eje urbanístico del siglo XIX se trazó durante su gobierno, como consta en el Tomo IV de la Historia General de Guatemala: “Reina Barrios definió el crecimiento de la ciudad hacia el sur y acentuó la influencia urbanística francesa, con bulevares, monumentos, parques y barrios residenciales. Todo el proyecto estuvo asociado a la Feria Internacional, celebrada en 1897”.
En ese contexto, explica el historiador Aníbal Chajón, se remozó el área verde ubicada frente a la Penitenciaría Central. Este edificio existió donde hoy se encuentran las sedes del Ministerio de Finanzas Públicas, la Corte Suprema de Justicia y el Banco de Guatemala. El centro de privación fue inaugurado en 1877, clausurado en 1957 y demolido un año después.
“Originalmente se le conoció como Jardín de la Penitenciaría, pero con el trazo que Reina Barrios impulsó hacia el sur, se habilitó  un parque. Se construyó un quiosco, se jardinizó y con frecuencia se ofreció conciertos los fines de semana. El lugar invitaba a los ciudadanos a visitar la Exposición Centroamericana, así como a recorrer  el Bulevar 30 de Junio, hoy Avenida de La Reforma, que fue inaugurado en 1897 emulando los paseos parisinos”, indica Chajón.
El historiador asegura que para la época, no había mayor urbanización más allá del templo  El Calvario, en la actual 18 calle de la zona 1. Por eso era prioridad contar con puntos que conectaran lo conocido con las nuevas propuestas impulsadas por el gobierno.
 

Parque Navidad

Manuel Estrada Cabrera sucedió a Reina Barrios en la presidencia. Durante su gestión (1898–1920) el espacio verde frente a la Penitenciaría cayó en el descuido. “No se puso más atención a los conciertos”, refiere Chajón. El área permaneció en las mismas condiciones hasta que fue remozado por Jorge Ubico Castañeda, quien fue presidente de 1931 a 1944.
En 1935, para el centenario del nacimiento de Justo Rufino Barrios, Ubico Castañeda dio nueva vida al jardín. Ese mismo año inauguró la Torre del Reformador, el 19 de julio, dedicada también a Barrios, su padrino de bautismo.
Un nuevo nombre surgió entonces para el área verde. Debido a que el nacimiento de Barrios marcó otra  etapa para el parque, la gente hizo una asociación de fechas e ideas. “Ya que se festejaba el nacimiento del expresidente, se comenzó a hablar de la natividad o navidad de Barrios. La designación no tenía relación con la Natividad de Jesús”, cuenta el historiador.
 

Vestigios

El antiguo Jardín de la Penitenciaría  o Parque Navidad existió hasta finales de la década de 1950. Se podría suponer que se trató de un terreno plano, pero no fue así, pues  ocupó  solo una porción, en el resto había elevaciones y hondonadas.
Se extendió, de norte a sur, de la actual Plaza Italia (al frente de La Municipalidad) hasta el paso del tren donde ahora está el antiguo Teatro del Puente y el Gran Centro Comercial Zona 4.
Se conservan algunas postales y fotografías de la primera mitad de siglo XX, tomadas desde las partes altas, posiblemente equivalentes a un piso de altura. Eso se deduce por la vista que se logró capturar desde el sur de la ciudad. Otros ángulos mejor documentados muestran que el parque no estaba al nivel de la calle.
“Los montículos pudieron haber tenido relación con Kaminaljuyú”, supone Chajón.
 

Nuevo uso

Para la segunda mitad del siglo XX la 7ª. avenida había sido prolongada y conectaba con el Bulevar 30 de Junio. Pero la 6ª. avenida no se desarrollaba de igual manera. Entre ambas vías estuvo todo el terreno donde existió el Parque Navidad.
El área final de la otra  avenida comenzó a ser un vertedero clandestino de basura en su límite con la actual 24 calle de la zona 1. Ese hecho, unido a que la chatarra del viejo tranvía que funcionó en la ciudad estaba también en el sector y a que el parque había dejado de ser el lugar recreativo de antaño, fueron decisivos para su nuevo destino: la construcción del Centro Cívico.
En la portada del 16 de diciembre de 1953, Prensa Libre resaltó el abandono del parque: “Las ruinas que usted ve se encuentran en pleno corazón de la ciudad. Son los restos de lo que otrora fuera la baranda del abandonado Parque Navidad, en la séptima avenida sur prolongación”.
 

Centro Cívico

“Los periodistas visitaron los trabajos iniciales del Palacio Municipal que se levantará entre la sexta y la séptima avenidas en un predio cercano al antiguo Parque Navidad. Será un edificio de seis pisos y un sótano que calcula terminará a fines de este año”, consta en una nota de Prensa Libre del 26 de febrero de 1956.
La obra finalizó en 1958 y  fue el primero de los edificios del Centro Cívico. En el resto del viejo parque se edificó la sede del Seguro Social. “El 1 de junio de 1956 se iniciaron los trabajos de construcción del nuevo Edificio de Oficinas Centrales del Instituto Guatemalteco de Seguridad Social (IGSS). El lugar elegido fue el entonces llamado predio del exparque Navidad, 7ª. avenida prolongación, un terreno que la Municipalidad capitalina traspasara a favor del IGSS en pago de su deuda”, consta en el libro 50 años del Centro Cívico, 1955-2005.  La publicación resalta que para la construcción fue necesario remover 90 mil 525 metros cúbicos de tierra.
Los trabajos de ambos proyectos marcaron el fin. En la misma época se comenzaron a edificar los inmuebles del Ministerio de Finanzas Públicas, Corte Suprema de Justicia, Banco de Guatemala y Crédito Hipotecario Nacional, y que completaron el proyecto del Centro Cívico. Fueron construidos sobre el terreno de la Penitenciaría, que estaba ubicada en frente del Parque Navidad, así como en un solar contiguo donde existió un campo de futbol, llamado Estadio Autonomía.
 

Anécdotas

“Los jóvenes frecuentaban mucho ese campo de futbol. Era una de las atracciones de la ciudad como lo fue también el Parque Navidad. Su apogeo  fue en los años 1930 y 1940. Fue testigo de muchos hechos políticos e histórico, como el paso de las tropas militares en tiempos de Estrada Cabrera y de manifestaciones civiles”, indica el historiador Celso Lara.
El escritor Héctor Gaitán, menciona también el parque en más de uno de los títulos de su serie La calle donde tú vives. En el tomo siete lo describe así: “estaba situado donde hoy se ubican las oficinas centrales del IGSS. Era un pequeño bosque con árboles enanos y poca grama, con un quiosco y una fuente de agua cristalina en la parte de abajo, donde incluso había peces de colores. Los domingos daba concierto la marimba Alma Cautiva, integrada por reos de la Penitenciaria Central”.
 Agrega Gaitán que enfrente quedaba una parada de la ruta Arauco que cubría del Centro a la Torre del Reformador. El sitio colindaba con la línea del ferrocarril y el Puente de la Penitenciaría y con las faldas del cerro San José donde finalmente se construyó el Centro Cultural Miguel Ángel Asturias.
El periodista Augusto Acuña García lo incluyó en sus memorias, publicadas en el libro Las calles y avenidas de mi capital y algunos callejones.
“El presidente José María Orellana (1921–1926) había ordenado que se hiciera un laberinto, pues era una novedad, pero más tarde fue utilizado por los enamorados para otros fines, con lo cual degeneró completamente. El general Jorge Ubico ordena en 1935 que se reforme y fue construido un mapa del pueblo de San Lorenzo, lugar donde nació Justo Rufino Barrios”, escribió el periodista.
Agregó que “el Gobierno no pagaba las prestaciones de los trabajadores del Estado a la Seguridad Social y le canceló posiblemente una parte con el terreno del mencionado parque y construyó las oficinas centrales, quedándole otra parte a la Municipalidad, con lo cual se da comienzo a la formación del Centro Cívico”.

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