Las directrices de la Academia de la Medicina del Sueño de Estados Unidos oscilan entre 16 horas para los bebés y 8 horas para los adolescentes.
BBC NEWS MUNDO
¿Cuántas horas al día deben dormir los niños y los adolescentes?
Especialistas en desórdenes del sueño han creado nuevas recomendaciones sobre cuánto deben dormir los menores de edad dependiendo de la etapa de la vida en la que se encuentren.
Dormir tanto menos como más de lo recomendado puede tener repercusiones en la salud mental, física y emocional de los niños. (THINKSTOCK)
Según la academia, los menores de todas las edades se benefician física, mental y emocionalmente de una cantidad adecuada de horas de sueño.
En contraste, la falta de sueño puede conducir a problemas que incluyen la depresión y hasta los pensamientos suicidas.
También se hacen recomendaciones de las actividades que los menores deben dejar de hacer antes de ir a la cama para conciliar el sueño.
Las recomendaciones se publicaron este lunes, con la anuencia de la Academia de Pediatría de EE.UU. en la revista Journal of Clinical Sleep Medicine.
La Academia de Pediatría de EE.UU. recomendó además que todas las pantallas, como las televisiones y computadoras, se apaguen media hora antes de ir a la cama y que los padres no deben permitir a sus hijos tengam estos aparatos en sus dormitorios.
Para crear las guías, los autores estudiaron las investigaciones anteriores sobre la relación entre la duración del sueño y la salud infantil.
Para los menores de todas las edades, los beneficios de un buen y prolongado sueño incluyen mejor atención, comportamiento, aprendizaje, memoria, regulación emocional, calidad de vida y mejoría en la salud física y mental, según los especialistas.
En contraste, los niños que no duermen lo suficiente todas las noches están expuestos a un mayor riesgo de lesiones, hipertensión, obesidad y depresión.
Los adolescentes que no logran dormir lo suficiente podrían correr el riesgo de hacerse daño a sí mismos o de contemplar el suicidio, dicen los investigadores.
Sin embargo, los autores de las guías señalaron que los menores que duermen más de lo recomendado para sus edades también pueden sufrir repercusiones adversas para su salud incluyendo presión arterial alta, diabetes, obesidad y problemas de salud mental.
En caso de que el menor esté durmiendo muy poco o demasiado, se aconseja a los padres consultar al médico para determinar si padece un posible trastorno del sueño que se pueda tratar, según las guías.
Estas no incluyen recomendaciones para bebés menores de 4 meses porque los patrones y duración del sueño en infantes tan pequeños varían muchísimo y no hay suficiente evidencia científica para establecer vínculos entre el sueño y sus efectos sobre la salud para este grupo.