Moda y Estilo

Donatella Versace no cree en diseños de famosos

La diseñadora italiana Donatella Versace, quien ha aportado una nueva visión al imperio de la moda, luego de heredar la firma de su hermano Gianni, celebró 56 años al mostrar atuendos de su nueva colección y declarar que no cree en los diseños de las celebridades.

En entrevista reciente, la menor de los Versace aseguró que los artistas que diseñan su ropa como Madonna y Victoria Beckham les hace falta más glamour para ser considerados verdaderos miembros del gremio.

Por otro lado, a través de la modelo Abbey Lee, la diseñadora presentó algunos atuendos de esta temporada primavera-verano, de entre los que destacan vestidos con formas voluminosas, volantes en cascada y colores intensos caracterizan las propuestas de la modista.

Donatella, quien junto a su hermano Gianni y Santo, aprendió de su madre los secretos que tiempo después pondrían en práctica para formar el imperio actual, que tiene como distintivo a la inconfundible cabeza de Medusa, nació el 2 de mayo de 1955, en Reggio Calabria, al sur de Italia.

En la década de los 70, a los 20 años se fue a vivir con su hermano Gianni a Florencia, donde él trabajaba para las marcas Genny y Callaghan.

Es ahí donde Gianni, impulsado por el éxito de sus diseños, mostró su primera firma de colección para mujer en el museo de arte, Palazzo della Permanente, de Milán.

Ya como un diseñador prometedor contrató a su hermana como encargada de relaciones públicas para su naciente marca, pero debido al talento de ella y a la inspiración que le provocaba al diseñar, Gianni la conservó como su colaboradora más cercana.

En 1980, Donatella tomó cada vez más importancia, ya que se empezó a encargar de la segunda línea del modisto llamada Versus, creación que su hermano elaboró pensando en ella.

Años más tarde, gracias a las habilidades en las relaciones públicas de Donatella, la marca ganó prestigio a nivel mundial aprovechando su contacto con famosos como Madonna y Demi Moore para anunciar la línea Versace.

En esa misma década, contrajo matrimonio con el modelo estadunidense Paul Beck, con quien procreó a su primera hija, Allegra, en 1986 y posteriormente, en 1991, a Daniel.

Durante este periodo, Donatella colaboró con su hermano Santo en la creación de sus propios diseños.

En 1997, al ser asesinado su hermano Gianni en su casa, la marca pasó a manos de la modista, quien se encargó del diseño de los modelos y su hermano Santo sería el encargado de las finanzas.

En 1998, ante la expectativa creada por la muerte de su hermano, Donatella montó su primer espectáculo de moda en el Hotel Ritz de París, donde dejó claro que pasaba por una nueva corriente en el diseño e impresionó a los asistentes.

En este nuevo periodo, la marca tuvo un nuevo esplendor ya que Donatella implementaría promocionar sus diseños mediante personalidades de Hollywood, como Jennifer López, Christina Aguilera y Jonathan Rhys Meyers.

Así como invitar a artistas como Elton John y el príncipe Carlos de Reino Unido a sus pasarelas, colocándose como parte de la elite europea.

El 29 de julio de 2004 los diarios informaron que Donatella Versace había ingresado a un centro de rehabilitación contra las drogas debido a su adicción a la cocaína, donde estuvo internada algunas semanas.

Al año siguiente, en 2005, seleccionó a la cantante Madonna para ser la vocera de la firma en un acuerdo que se reportó en cinco millones de dólares.

También en ese año participó en la campaña benéfica de la fundación Breast Health Institute, para promover la investigación y el tratamiento del cáncer de mama, destinando además parte de las ganancias recaudadas en sus tiendas de Londres y Roma para esta asociación.

En 2007, tanto Donatella como su fallecido hermano Gianni recibieron el premio Walk of Style, por su contribución al mundo de la moda y el espectáculo; además, ambos obtuvieron una Plancha Dorada en la avenida Rodeo Drive de Beverly Hills.

Ese año, la diseñadora basó su colección de primavera en la figura del secretario privado del Papa Benedicto XVI, monseñor Georg Gänswein.

En 2008, fue galardonada por The Fashion Group International con el premio Superstar, dentro de la fiesta anual “The night of stars” , que celebra desde 1983 con el fin de galardonar a los estilistas, creadores de moda y diseñadores más destacados.

En 2009 demostró que su creatividad no sólo se limita al mundo de las pasarelas, al presentar en la Feria del Mueble de Milán su colección de mobiliario para el hogar.

El siguiente año durante un viaje a Nueva York, la modista gastó en sólo 10 minutos más de tres mil euros en lentes.

La diseñadora italiana se hizo toda una colección de lentes de gran valor, unos ocho modelos exclusivos, cuyo precio partía de los 370 euros, para un total de tres mil euros.

(con información de www.elinformador.com.mx)