Este alimento resulta apropiado para las personas que buscan perder peso, ya que aporta pocas calorías, y además, la fibra ayuda a regular el trabajo del aparato digestivo.
El consumo de esta fruta, al menos tres veces a la semana, ayuda a regular el azúcar en la sangre. Por su bajo grado en sodio e hidratos de carbono y alto en potasio, las peras resultan muy recomendables para las personas que tienen hipertensión arterial o afecciones cardiovasculares. Contiene levulosa, una sustancia benéfica para la dieta del diabético, ya que ayuda a controlar el nivel de glucosa en la sangre.
Más beneficios
La pera también contiene vitamina A, B1, B2 C y E. Además, es fuente de ácido fólico y hierro, este último es indicado para fortalecer los glóbulos rojos.
Su alto contenido en pectina la convierte en un gran aliado para reducir los niveles de colesterol.
La pera ejerce una suave acción astringente y evita las flatulencias intestinales, típicas en enfermedades como la colitis.
Es diurética y laxante suave por lo que se recomienda beber jugo de pera para regular los movimientos del intestino en casos de estreñimiento.