A su juicio, estos masajes previos deben consistir en “tocar, sentir y hacer sentir con las manos experiencias táctiles agradables a la pareja en todo el cuerpo”.
“El secreto de un buen masaje es saber entregarse, perder el miedo a tocar a la otra persona, conectar con su cuerpo y aplicar las manos en los lugares en que el instinto aconseja”, enfatiza Eva Moreno, quien recomienda acompañar esta técnica con una copa de champán, unas velas o un bol de fresas para favorecer el acercamiento erótico.
Las lociones que Moreno aconseja para aplicar masajes se basan en fragancias ligeras y fáciles de aplicar en las que el aceite de almendras resulta el producto clave, junto con una composición herbal suave, como la esencia de canela, el jazmín o la vainilla, que refuerza, según su opinión, el sentido del olfato y el sentido del gusto, “hasta encontrar el aroma que mejor sintonice con la pareja”.
“Muchas de estas lociones contienen aromas muy cuidados que activan la producción de las propias feromonas naturales del organismo, una sustancia que aumenta el magnetismo entre los amantes y que les proporciona una energía muy sensual”, asegura Eva Moreno.
De todos modos, en cualquier hogar se puede encontrar una loción body-milk, un aceite bronceador, un aceite de oliva rebajado con limón, glicerina con limón o crema de aloe vera, para utilizar como crema de masaje afrodisíaco si surge el momento.