El sacerdote Orlando Pérez, del Seminario San José, dijo que la tradición de las familias quetzaltecas consiste en colocar la Cruz en la entrada principal de la vivienda como símbolo de fe y cómo protección.
“Al seguir con esta tradición se exalta el simbolismo de la cruz como una expresión de recuerdo de la vida, pasión y muerte de Jesucristo”, expresó.
Pérez comentó que, desde el 1 de mayo, fueron instaladas varias ventas de cruces en las calles de Xela, lo que forma parte de una de las tradiciones que identifican a los quetzaltecos.
“Esta tradición aún se mantiene viva en varios municipios de Quetzaltenango“, dijo.
Además de la celebración del Día de la Cruz, en La Esperanza se celebra el Día del Santo Niño de la Cruz, que, según el sacerdote, es una representación de la niñez de Cristo, ya que desde pequeño intrínsecamente ya estaba predestinado a cargar la cruz.
Cristina Coyoy, vendedora de cruces, dijo que cada año las calles aledañas a las iglesias y mercados lucen coloridas por las ventas improvisadas de cruces, las cuales reflejan la creatividad de los vendedores.
“Esta tradición identifica a los quetzaltecos. Desde que tenía 12 años acompañaba a mi mamá a vender las cruces en la zona 3 de Xela”, expresó.
Manifestó que cada 3 de mayo cientos de feligreses se dan cita en las iglesias para bendecir sus cruces, las cuales colocan en la puerta de sus casas.
Comentó que el precio de las cruces oscilan entre Q10 y Q100.
Josefina García, vecina, explicó que para su familia colocar una cruz en la puerta de su casa simboliza protección.
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