La propuesta del Mintrab es restaurar el servicio de teleférico, que comenzó a funcionar en 1978 y que atraía a cientos de personas al Lago de Amatitlán.
En 1998 el teleférico cerró sus puertas, pero volvió a atraer a turistas en 2006; sin embargo, la caída de un rayo provocó que quedara sin funcionamiento en el 2012.
“Necesitamos la inversión para remozar, restaurar, cambiar componentes y darle una vida útil de 40 años”, señaló Samayoa.
Actualmente el ministerio está haciendo una consultoría, para que a partir del próximo año se tengan las bases para la licitación y poder restablecer este servicio de recreación.
Recuerdos
El 29 de junio de 1978, el entonces presidente Kjell Eugenio Laugerud García inauguró el teleférico de Amatitlán, con un costo de Q1 millón 690 mil. Aunque un mes después comenzó la diversión para los visitantes.
El teleférico que estuvo en funcionamiento por 26 años, fue habilitado con 27 góndolas, actualmente se dejaron 22, con el nombre de los departamentos del país.
Las cabinas recorrían una distancia de aproximadamente tres kilómetros, a una velocidad de 3.65 metros por segundo. La estructura está formada por nueve torres que sostienen los cables del recorrido y dos terminales de abordaje.
La diversión de niños y adultos se extendía por 30 minutos, aprovechaban para obtener la mejor vista del lago y dejar a un lado la rutina diaria de la semana.
El costo por vuelta empezó en Q1, hasta llegar a Q15 para adultos, mientras los niños pagaron Q0.50 y la última vez Q5.
La falta de mantenimiento y prioridades para los gobiernos llevó a que el funicular dejará de funcionar hasta 1998, pero en 2006 resurgió, pero por poco tiempo.