Tras ser el indiscutible rey el año pasado con la sorprendente marcha al PSG, a medida que se acerca el final de la temporada vuelve a tener al mercado futbolístico en vilo.
El interés del Real Madrid y la desconcertante situación que vive en el PSG resultan una mezcla explosiva con junio a la vuelta de la esquina.
En el PSG el nerviosismo va en aumento. Las señales que Neymar envía desde Brasil, donde se recupera luego de su intervención quirúrgica, no ayudan a apaciguar la ansiedad que se respira en el club francés, en el que cada vez más se consolida la idea de que el jugador está preparando su salida del club.
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Contrato millonario
El PSG tiró la casa por la ventana y pagó €222 millones por el jugador que tenía que convertirse en el eje principal del club y empujar al equipo parisino hacia un salto de calidad en Europa.
Pero no ha sido así. La lesión sufrida por Neymar ante el Olympique de Marsella, el 25 de febrero, y la posterior eliminación en octavos de final de la Champions a manos del Real Madrid han truncado por completo las expectativas de los parisinos, que completarán un año como los anteriores. Claros dominadores del campeonato doméstico pero irrelevantes en Europa.https://twitter.com/Radioestadio/status/987022824824074240
El contrato de Neymar no tiene cláusula de rescisión para este año, y si el Madrid lo quiere deberá negociar con el PSG obligatoriamente. Otra cosa será a partir del 1 de septiembre, cuando entra en vigor una cláusula de rescisión de €222 millones -la misma cantidad que pagó el PSG al Barcelona- y que puede aumentar según los objetivos alcanzados por el equipo y en lo personal.
No hay cláusula de rescisión
La Liga de Futbol Profesional (LFP) de Francia desmintió este viernes que el contrato del brasileño Neymar con el París Saint-Germain (PSG) contenga una cláusula de rescisión que le permita salir del club si no se cumplen ciertas condiciones.
Según publica la edición digital del diario L'Équipe, la LFP desmintió las informaciones que apuntan a que el brasileño incluyó esa cláusula que le liberaba de su contrato a cambio del pago de €300 millones.
Además, recordó que el artículo 202 de su reglamento interno prohíbe la cláusula de rescisión.
“Los clubes no pueden firmar un contrato que contenga una cláusula liberatoria que prevea la ruptura de la relación contractual por parte de una u otra de las partes y tampoco pueden incluir una cláusula de rescisión unilateral”, señaló la LFP.
Con información de Marca y Sport
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