Desde que se conoció su aprobación, la Procuraduría de los Derechos Humanos, la Procuraduría General de la Nación, la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos y población en general mostraron su rechazo pues se considera una violación a los derechos humanos y laborales.
He derogado los salarios mínimos diferenciados por no ser acordes a los principios, derechos y garantías de la CPR. pic.twitter.com/mUREQtaLGn
— Jimmy Morales (@jimmymoralesgt) February 2, 2016
La derogación se oficializa con la publicación del Acuerdo Gubernativo 35-2016, que entrará en vigor a partir del miércoles 3 de febrero. Allí especifica que los salarios diferenciados “no son acordes a los principios, derechos y garantías sociales que nuestra Constitución garantiza”.
El mencionado acuerdo está firmado por el presidente Jimmy Morales, la ministra de Trabajo, Aurora Leticia Teleguario Sincal y Carlos Martínez, secretario general de la Presidencia.
Un análisis de Prensa Libre, publicado el pasado 6 de enero, detalla que el salario diferenciado estaba Q1 mil 585.65 debajo del costo de la canasta básica alimentaria (CBA), por lo que una familia de cinco integrantes solo podría alimentarse por 16 días.
Expertos determinaron que una familia necesitaría al menos Q118 diarios y Q3 mil 540.60 al mes para cubrir la canasta básica vital.
El entonces presidente, Alejandro Maldonado, durante una visita a Guatatoya, El Progreso, en un acalorado discurso, defendió la decisión de aprobar los salarios diferenciados.
Maldonado Aguirre afirmó que la aprobación de estos salarios diferenciados evitarían la migración y violencia, y afirmó: “yo no lo impuse, tampoco las juntas paritarias. Aquí esta la oferta de salario, lo quiere o no lo quiere”.
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