Comunitario

Personaje del Año 2023: La democracia descansa en 12 mil voluntarios

Este año, Prensa Libre reconoce a los miles de guatemaltecos como Personaje del Año, por su labor en el proceso electoral.

La ciudadanía guatemalteca que participó en el voluntariado electoral fue seleccionada como Personaje del Año 2023.

Prensa Libre reconoce a los más de 12 mil ciudadanos cuyas acciones decididas, inspiradas y sostenidas fueron durante el 2023 un ejemplo, producto de un ciclo virtuoso que debe ser valorado, reproducido y ampliado en la realidad personal, familiar y comunitaria, a fin de generar sinergias que contribuyan a poner en alto el nombre de Guatemala.

Esta casa editora otorga desde 1992 el galardón a personas o grupos destacados durante el año, incluyendo artistas, políticos, deportistas y empresarios.

La iniciativa nació como una presea de alto valor moral para el guatemalteco que más contribuya en forma positiva al desarrollo del país.

En 1992, cuatro guatemaltecos recibieron premios internacionales por su labor. Ellos fueron Rigoberta Menchú, Hellen Mack Chang, Rodolfo Quezada Toruño y Ramiro de León Carpio, lo cual dio pie a esta iniciativa anual.

Compromiso cívico

Por haber sido custodios del voto y de la voluntad ciudadana, por haber empadronado a la ciudadanía y apoyado a los votantes, se les otorga esta mención.

El voluntariado cívico es promovido por el Tribunal Supremo Electoral (TSE) para los comicios para la participación de los jóvenes, pero analistas han resaltado en reiteradas ocasiones que el valor del sistema electoral de Guatemala se cimienta en que la misma ciudadanía es la custodia.

Desde el inicio de los preparativos que son actividades como el empadronamiento, que son los mismos ciudadanos —en este caso la juventud voluntaria— la protagonista y quienes son los encargados de los procedimientos que involucran el trato con el electorado.

Cuando se modificó la Constitución de la República se buscó diseñar un modelo electoral en el que se respetara y diera certeza del voto, y por ello se incluyó como parte de la logística, explicó María del Carmen Aceña, del Centro de Investigaciones Económicas Nacionales (Cien).

“Se diseñó un nuevo sistema, en donde participan los ciudadanos, que son al final los que llevan a cabo la operación del proceso de conteo de votos y también con la presencia de los fiscales como parte importante del proceso”, detalló Aceña.

A su juicio, la clave es la combinación de los voluntarios con los fiscales de los partidos políticos, porque un grupo vela por los intereses de la población y el otro por los de la agrupación a la que representa.

Cada voluntario ofrecía asistencia a los guatemaltecos para facilitar el proceso de sufragio. (Foto Prensa Libre: Carlos Hernández)

Agregó que la importancia del sistema piramidal es la integración de voluntarios que tiene el TSE. Este designa a las juntas departamentales, que eligen a las municipales y estas, a las receptoras de votos.

“Entonces, lo interesante es que no es a nivel centralizado que el TSE lo hace, sino que es a través de la descentralización que se van conformando equipos”, indicó Aceña.

Reconoce que ese acto de civismo empieza en la familia y se aprende con el ejemplo de los demás.

“Al final también es como como un trabajo que se hace en equipo que todas las familias lo están esperando porque se le dedica prácticamente dos días cada cuatro años enteramente a la patria. La gente trata pues también de estar al día, de estudiar, de conocer qué es lo nuevo que hay, con el objetivo realmente de de brindarle a la población un buen servicio”, compartió.

Las elecciones infantiles juegan un rol importante en la creación de civismo y la iniciativa de participar en las elecciones.

Aceña la considera una herramienta que suma en la creación de civismo y cultura de voluntariado electoral.

Estas “se crearon a través de empresas que están interesadas en simular las elecciones de presidente y vicepresidente.

Entonces se le va creando al niño, en primer lugar, un imaginario de que él tiene decisión porque él, a través de su voto, puede tomar decisiones, y en segundo, que se va acostumbrando —a esa participación—”, expresó la investigadora.

Pedro Cruz, de Primero Guatemala, calificó a los voluntarios como los “superhéroes de la democracia”, porque son la garantía y quienes resguardan el voto, por lo que es importante reconocer su labor.

“Es bueno que se reconozca el trabajo para ayudar a impulsar y dar a conocer la necesidad de participar”, celebró Cruz.

En ese sentido, destaca las iniciativas que reconocen la labor de los voluntarios porque es un trabajo que hacen, sobre todo porque las juntas están conformadas por la misma ciudadanía.

“Es de suma importancia resaltar la forma en la que están conformadas las juntas que son guatemaltecos que de manera voluntaria deciden dar su tiempo para estar ahí, en algunos lados de Guatemala las veinticuatro horas del del día, durante la jornada electoral”, resaltó.

Motivación

Luego de los acontecimientos acaecidos después de la primera y segunda vuelta electorales, los analistas consideran que dependerá de las instituciones si el total de voluntarios se mantiene, disminuye o aumenta.

“Depende de quiénes serán los líderes, porque los líderes, especialmente pasando por el TSE, son los que convocan a los primeros, que son las JED, y si se crea un ambiente de cordialidad y de alegría, yo creo que mucha gente estaría de nuevo con mucho entusiasmo tratando de participar”, dijo Aceña.

La investigadora recordó que este año electoral fue más pesado, incluso para las Juntas, debido a los recursos legales y acciones planteadas luego de que se conocieron los resultados. Después de la primera vuelta se realizaron unas segundas audiencias de revisión de resultados durante una semana, que, aunque los presentes fueron los miembros de las JED, fue el trabajo de los voluntarios de las JRV y centros de votación el que se puso en tela de duda, afirmó.

“Es importante que todos conozcamos nuestro sistema, que respetemos a las JRV, y también tener un poco de paciencia; hay que revisar la Ley Electoral”, exhortó.

Aceña aprovechó para agregar que existen familias enteras que participan en el voluntariado y esto se vuelve una tradición familiar, además de que algunas personas tienen años de participar en dicho proceso.

Aceña ha participado en el voluntariado, junto a su familia, desde hace más de 30 años y por ello dice conocer en carne propia el deseo de querer colaborar con la democracia de Guatemala.

A su criterio, un momento emblemático de las jornadas de votación es cuando se abre la mesa, porque el presidente de la JRV toma la autoridad, como lo indica el procedimeinto, y los demás acatan este extremo.

Una persona no vidente es asistida por uno de los voluntarios, siempre pendientes de las necesidades de los votantes en los centros de votación. (Foto Prensa Libre: Hemeroteca PL)

Cruz considera que sí hay un cierto riesgo que algunas personas que fueron voluntarios en este evento no tengan el deseo de hacerlo en las próximas elecciones, pero señala que la motivación también recae en la manera en cómo se valore ese servicio por los actores externos, como por ejemplo los medios.

Tecnología

En el reciente proceso de elecciones, las Juntas se apoyaron del sistema de Transmisión de Resultados Electorales Preliminares (Trep), cuya función es dar a conocer las tendencias conforme las mesas van terminando de contabilizar los votos; sin embargo, no le resta potestad a las Juntas de certificar los datos y declarar los resultados finales.

Sin duda, también en este proceso las redes sociales de los candidatos y sus campañas jugaron un papel importante.

Aceña opina que se debe implementar más tecnología en forma paulatina, sin remover la custodia del voto de la ciudadanía.

“Durante estos últimos años, de lo que nos hemos dado cuenta es de que es el mejor sistema que tenemos. Debemos introducirles la tecnología, pero con mucho cuidado, porque al final esto —la participación ciudadana— es lo que nos ha surtido efecto”, analizó.

El civismo ha sido parte fundamental en el ánimo de los voluntarios en las mesas receptoras de votos. (Foto Prensa Libre: Esbin García)

Historia

Los miembros de las Juntas Receptoras de Votos colaboran en las elecciones ad honorem, sin embargo también hay grupo de jóvenes entre los 15 y 25 años que apoyan durante la jornada.

Al acudir al centro de votación, son los voluntarios quienes guían a la ciudadanía hacia que mesa dirigirse, además son los que apoyan a los adultos mayores, personas no videntes, o cualquiera que necesite acompañamiento dentro del centro.

Esto nació como una manera de “promover la participación de la juventud de todo el país, fomentando valores cívicos, para contribuir en la formación de la ciudadanía guatemalteca”, aclara la entidad electoral.

Desde el 2011 que surgió esta iniciativa donde los voluntarios toman parte en empadronar en diferentes puntos del país a las personas, en promover el voto informado y responsable y en el apoyo brindado durante la jornada electoral.

ESCRITO POR:

Fátima Najarro

Periodista de Prensa Libre especializada en el Organismo Ejecutivo, fiscalización y política, con varios años de experiencia en medios escritos.

Douglas Cuevas

Periodista de Prensa Libre especializado en temas políticos y del sector justicia, con 15 años de experiencia en periodismo escrito, televisivo y radial.