“Espero justicia para Isabel Veliz Franco, que ella descanse en paz y yo comenzar a vivir la vida que me cortaron a mí cuando mataron a mi hija”, dijo Franco en las horas previas a que el Tribunal de Mayor Riesgo A resuelva en torno al sindicado Gustavo Adolfo Bolaños Acevedo.
“Ha sido mucho sufrimiento y se me ha consumido la vida. Es justo que esto termine con justicia y no impunidad”, sostuvo Franco, que resaltó el hecho de que, aunque su hija haya sido la víctima, hay un antes y después en la investigación sobre la muerte de mujeres en Guatemala.
“Pasaron 20 años lastimosamente, no se hizo justicia en su momento, pero se está haciendo ahora”, agregó Franco.
El crimen contra Veliz Franco, de 15 años, ocurrió el 16 de diciembre de 2001. Bolaños Acevedo es el sospechoso, quien acosaba a la adolescente cuando ella trabajaba como vacacionista en un almacén de la zona 1 capitalina.
Tanto Franco como el Ministerio Público pidieron 50 años de cárcel contra Bolaños Acevedo.
El caso es emblemático puesto Franco denunció la desaparición de su hija al menos cuatro veces sin ser escuchada. Tuvo que intervenir la Corte Interamericana de Derechos Humanos contra el Estado de Guatemala para que el caso avanzara.