Pecadores locales alertaron a los servicios de guardacostas griegos y a una estación de ayuda a los migrantes en altamar (MOEA) de un barco de unos 60 metros de eslora que había naufragado en una zona rocosa, por lo que los servicios de auxilio respondieron inmediatamente.

En total fueron rescatadas 38 personas. Una mujer habría caído al mar, al igual que el niño encontrado muerto.

MOEA es una fundación con sede en Malta dedicada a la búsqueda y rescate de personas en situación de peligro en el mar.

Atrapados en un islote

En tanto, guardacostas turcos rescataron a 57 migrantes que trataban de llegar a Europa a través de Grecia y se habían quedado atrapados en un islote en el mar Egeo, informaron medios locales este domingo.

Los migrantes intentaban alcanzar la isla griega de Lesbos, pero su embarcación empezó a tener problemas tras salir de Dikili, en la provincia turca de Esmirna, informó la agencia de noticias Anatolia. Cuando su embarcación falló, se quedaron atrapados en un islote rocoso, no lejos del punto de salida.

En las fotografías de la agencia Anatolia puede verse a los migrantes, entre ellos varios niños, pidiendo ayuda desde la diminuta isla.

Doce de los más vulnerables, incluidos tres niños, fueron rescatados por los helicópteros de los guardacostas, mientras los 45 restantes fueron recogidos en barcos de pesca, ya que las embarcaciones más grandes de los guardacostas no podían acercarse a las rocas. Después, todos fueron conducidos al puerto de Dikili, añadió la agencia.

Turquía, que acoge a 2,2 millones de refugiados de la guerra civil siria, se ha convertido en un trampolín para migrantes que tratan de llegar a Europa, muchos de los cuales pagan a traficantes miles de dólares por la arriesgada travesía.

Según la agencia de la ONU para los refugiados y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), más de un millón de migrantes y refugiados llegaron a Europa en 2015, la mayoría por mar. Unos 800.000 lo hicieron a través de Grecia.

La llegada del invierno y el empeoramiento de las condiciones en alta mar no parecen disuadir a los migrantes, que siguen llegando diariamente a las costas griegas.

Piden limitar ingresos

El gobernador de la región alemana de Baviera quiere limitar a 200 mil personas el número de refugiados que acepta el país cada año, y cree que Estados Unidos es responsable en parte por la actual crisis migratoria.

Horst Seehofer dijo al semanario alemán Bild am Sonntag que el país sólo puede integrar entre 100 mil  y 200 mil refugiados cada año.

Baviera fue el punto de entrada en Alemania para la mayoría del millón de solicitantes de asilo llegados al país el año pasado. La canciller, Angela Merkel, ha rechazado un límite de refugiados.

En una entrevista publicada el domingo, Seehofer afirmó que otros miembros de la Unión Europea, países árabes y Estados Unidos deberían asumir más carga en la crisis.

“Tenemos que agradecer a este último muchos de los problemas que hacen que la gente huya”, añadió, según le citó el periódico.