En su circulación en tierra, el fenómeno registra vientos máximos sostenidos de 65 kilómetros por hora (km/h), rachas de 85 km/h y se desplaza hacia el norte a 9 km/h.
Debido a ello, el organismo indico que se prevén lluvias puntuales torrenciales (150 a 250 milímetros (mm)) en el sur de Sonora y norte de Sinaloa, y lluvias puntuales muy fuertes (50 a 75 mm) en Baja California Sur, Chihuahua y Durango.
Además de vientos con rachas de 50 a 70 km/h y oleaje de 1 a 3 metros de altura en el sur del Golfo de California (costa oriental de Baja California Sur, costa norte de Sinaloa y costa sur de Sonora).
El SMN llamó a la población en general a extremar precauciones en las zonas de los estados mencionados por lluvias, viento y oleaje (incluyendo la navegación marítima) y atender las recomendaciones emitidas por las autoridades de Protección Civil en cada estado.
El pasado jueves, la titular del SMN, Alejandra Méndez Girón, señaló en conferencia que por efectos del sistema del 12 al 16 de septiembre se esperaban acumulados de lluvias de 200 a 250 milímetros (mm) en los estados de Baja California Sur, sur de Sonora y norte de Sinaloa, y de 100 a 150 mm en Nayarit, Jalisco y Colima.
Las autoridades mexicanas pronosticaron en mayo pasado hasta 41 ciclones con nombre en el océano Atlántico y el Pacífico, de los que al menos cinco golpearían el país, una cifra por encima del promedio en ambos casos.
En el Pacífico se pronosticaron de 15 a 18 sistemas con nombre, de los cuales entre 8 y 9 serían tormentas tropicales.
En octubre de 2023 el balneario de Acapulco, estado de Guerrero, sur de México, sufrió el paso del huracán Otis, que fue el ciclón más fuerte de la pasada temporada, que tocó tierra cerca del turístico Acapulco (Pacífico) el 25 de octubre como huracán de categoría 5, con vientos sostenidos de 260 km/hora, causando al menos 51 muertos y 34 desaparecidos, y pérdidas de unos 3.200 millones de dólares. EFE