EDITORIAL
Reclamo debió hacerse de otra manera
La comunicación virtual acorta distancias pero también puede crear mayores resonancias para ciertas declaraciones, sobre todo si estas entrañan reclamos o críticas. Tal es el caso del diálogo en línea que sostuvo el presidente Alejandro Giammattei con el Centro de Latinoamérica del Atlantic Council, el jueves último, durante el cual, al ser consultado sobre la cooperación de EE. UU., aseveró: “Eso de aliados con Estados Unidos no es cierto. Guatemala es aliado de los Estados Unidos, Estados Unidos no es aliado de Guatemala”.
Entre las razones que motivaron tal declaración está el envío de migrantes guatemaltecos contagiados con covid-19, una situación que fue señalada en abril por el mandatario y que llevó a una suspensión temporal de vuelos, los cuales se reanudaron bajo un protocolo de aplicación de pruebas de detección a todos los deportados.
El otro tema tratado por el mandatario guatemalteco fue referente al apoyo a la lucha contra el coronavirus que EE. UU. ha brindado a varios países, dentro de lo cual mencionó aparatos respiradores y concluyó con una frase coloquial: “A nosotros no nos ha caído pero ni siquiera un maíz picado”. La declaración causó una inusual reacción por parte del gobierno estadounidense, por medio del subsecretario para Asuntos Hemisféricos, Mauricio Claver-Carone, quien rechazó las aseveraciones del presidente Giammattei y las calificó de “desafortunadas”.
Además enumeró donaciones efectuadas por su gobierno, las cuales podrán ser admitidas o desmentidas por Guatemala. En materia de comunicación entre Estados suele haber siempre mucha mesura en las declaraciones, pero en este caso Claver-Carone hizo observaciones sobre la trascendencia internacional de los problemas recurrentes en el Ministerio de Salud, a los cuales atribuye la posible información inexacta recibida por el mandatario e incluso llegó a sugerir la posibilidad de irregularidades en esa cartera. De hecho, ya un viceministro fue sustituido por señalamientos y por ineficiencia en el desarrollo de concursos para adquirir insumos. Ayer nuevamente se cayeron los concursos mediante los cuales se comprarían equipos de protección para personal médico y paramédico, lo cual pone en riesgo la dotación de esos insumos en escala suficiente en el entorno de una creciente cifra de casos.
Es probable que Giammattei expusiera sus aseveraciones con base en la información que le proveen sus cuadros medios y altos, lo cual pone de manifiesto la importancia de contar con un equipo eficiente, puesto que toda declaración dada por su persona no es ya la de un político ni la de un candidato, sino del representante de la unidad del Estado de Guatemala.
Lo procedente es que la Presidencia solicite el detalle de todo lo aportado por EE. UU. y que confirme la recepción de los donativos, para luego inquirir sobre el destino que se ha dado a los mismos. De llegar a verificarse la recepción y uso de estos, lo más digno sería hacer una rectificación, pero no de haberse concretado estos insumos, bien podría responder con cifras, fechas y ofrecimientos fallidos. Igual se vale aprovechar la atención generada para plantear o reiterar, con firmeza diplomática, los requerimientos de Guatemala en cuanto al respeto de los derechos humanos de los connacionales detenidos por motivos migratorios y el apego a los protocolos sanitarios relativos al covid-19.