Salud y Familia

Dolores en el oido: cuáles son las causas más comunes y qué recomiendan los expertos para prevenir infecciones

Es importante conocer las causas que provocan dolor en los oídos, ya que la mayoría de casos no suponen algo grave.

Dolor auditivo: causas más comunes

Existen muchas causas que provocan el dolor en los oídos, por lo que es importante conocerlas, así como las formas más efectivas de evitar una infección. (Foto Prensa Libre: Dosfarma)

El dolor de oído u otalgia es uno de los síntomas más comunes entre adultos y niños, y es causa frecuente de consulta médica.

No siempre lo causan infecciones y puede manifestarse en uno o ambos oídos, aunque lo más habitual es que sea unilateral, señalan desde la Sociedad Española de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello (SEORL CCC).

Esta afección puede acompañarse de mareos, hipoacusia (disminución de la agudeza auditiva), acúfenos (sensación de percibir sonidos que no proceden de fuentes externas) y/o supuración de oído, y si se agrava o no remite, el paciente deberá ser valorado por el especialista en otorrinolaringología, de acuerdo a esta sociedad médica.

El dolor puede aparecer en cualquier parte del oído, interno, medio o externo, y su aparición no está relacionada necesariamente con una enfermedad o infección específica, por lo cual hay que evitar hacer suposiciones sin que un especialista (médico otorrino) lo valore, añaden desde el Instituto de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello de Madrid (IOM).

Según el IOM, existe una amplia cantidad de potenciales causas de la otalgia, incluidas algunas enfermedades no relacionadas directamente con el oído pero que, al alcanzar un punto álgido, afectan a este órgano y causan el dolor.

Un correcto diagnóstico resulta fundamental para poder tratar la enfermedad origen a tiempo. Cuando aparecen los primeros síntomas y estos persisten durante varias horas, es momento de visitar al otorrino”, recomiendan.

Dolor auditivo: causas más comunes
Los dolores auditivos pueden tener muchas causas, por lo que es importante ir con un especialista para determinar el origen del problema. (Foto Prensa Libre: Dosfarma)

La otalgia se clasifica en dos grandes grupos. Cuando su origen está en el propio oído, los otorrinos hablan de otalgia primaria, y cuando el dolor se irradia por un problema en otra zona corporal, se llama otalgia secundaria, según explica el farmacéutico Juan Desmonts, fundador de la plataforma de farmacia en línea Dosfarma o DF.

“Pese a lo molesto que resulta, en la mayoría de los casos el dolor no se debe a nada grave” y, a menudo su origen puede estar en zonas próximas al oído, que comparten nervios craneales, como la nariz, la garganta, la mandíbula, las piezas dentales, o derivarse de lesiones musculoesqueléticas en el cuello, la columna y la cabeza, según Desmonts.

Llevar una buena higiene auditiva es fundamental para no sufrir una otitis, la causa más común de que nos duelan los oídos”, explica este farmacéutico.

Apunta que “existen muchos productos de venta libre como gotas, aceites y espráis que pueden ayudar a mantener un adecuado cuidado auditivo”, advirtiendo que “no deben utilizarse hisopos o bastoncillos para limpiar el interior de los oídos y que, en caso de sufrir esta afección siempre hay que acudir a un especialista”.

Dolor en el oido
Los expertos recomiendan no utilizar hisopos para limpiarse los oídos, ya que pueden provocar daños internos. (Foto Prensa Libre: EFE)

El uso de hisopos de algodón para limpiar los oídos puede causar cortes en nuestros conductos auditivos, perforar nuestros tímpanos y dislocar nuestros huesos auditivos, según el IOM.
El equipo de expertos de Dosfarma enumera las causas más habituales del dolor auditivo y ofrecen algunas claves para identificar su probable origen.

Otitis

La mayoría de dolores de oídos se deben a la otitis, una inflamación del oído medio que suele estar provocada por virus y bacterias.

Las otitis son más frecuentes en los niños y bebés, que en los adultos, porque sus ‘trompas de Eustaquio’ (tubos que se extienden entre el oído medio y la faringe) son más cortas y horizontales y eso favorece que la mucosidad de la nariz pase al oído, según DF.

Los síntomas son dolor, fiebre, irritabilidad y merma en la audición, y pueden presentarse en uno o en ambos oídos.

Oído de nadador

Es una infección del conducto auditivo externo, generalmente producida por el agua que queda estancada en el oído después de nadar y que propicia el crecimiento de bacterias.

Dolor auditivo: causas más comunes
El agua de la piscina puede favorecer una infección auditiva. (Foto Prensa Libre: Dosfarma)

Suele presentarse con síntomas leves como enrojecimiento, picazón y molestias, pero, si no se cuida, tiende a empeorar, causando dolor, sensación de oído lleno, pérdida de audición, supuración e incluso fiebre.

Tapones de cerumen

El cerumen es una sustancia natural que segrega el organismo para proteger el oído de la entrada de agentes perjudiciales. Sin embargo, a veces, puede acumularse y taponar el conducto auditivo, lo que provoca dolor, pérdida de audición, sensación de oído lleno y percepción de ruidos, según Dosfarma.

Quistes

La aparición de quistes benignos en el oído, no es infrecuente. Estas ‘bolsas de tejido cerradas’ pueden localizarse detrás de la oreja, en el propio conducto o en el pabellón auditivo.

A veces no producen molestias, pero otras veces ocasionan dolor en el conducto auditivo externo, pérdida de la audición e infecciones recurrentes, según esta misma fuente.

Cambios de presión

Las diferencias de presión entre el interior y el exterior del tímpano pueden ocasionar dolor y molestias, que normalmente son de carácter leve y pasajero.

Ocurren porque la trompa de Eustaquio se bloquea e impide que la presión del oído medio se iguale con la del oído externo. A menudo tiene lugar cuando la persona cambia de altitud, durante los viajes en avión o en coche, o al bucear en aguas profundas, pudiendo provocar barotraumas (daños provocado por cambios en la presión del aire o del agua) en el oído.

Dolor auditivo: causas más comunes
Los oidos son propensos a dolores por infecciones, por lo que es recomendable ir con un experto. (Foto Prensa Libre: Dosfarma)

Los síntomas más graves son dolor, sensación de taponamiento, mareo, vértigos y pérdida auditiva.

Problemas dentales

Las caries o las lesiones en los dientes ocasionan infecciones con acumulación de pus e inflamación de los tejidos y un dolor que puede irradiarse hasta el oído del lado afectado, según Dosfarma.

Obstrucción por objetos o insectos

Es habitual que los niños se metan objetos en el oído, como bolígrafos, juguetes o palos. Los accidentes de este tipo causan un considerable dolor, porque el conducto auditivo podría describirse como “un hueso recubierto de fina piel”, señala esta fuente.

Rotura de tímpano

El tímpano, membrana que separa el oído medio del conducto auditivo externo, puede romperse debido a infecciones y también por otras causas, como ruidos muy fuertes, cambios de presión bruscos, objetos punzantes, golpes o accidentes.

Los síntomas de su rotura son dolor, secreciones, zumbidos, vértigo y pérdida auditiva.

Enfriamiento por bajas temperaturas

Algunas personas experimentan dolor de oídos cuando el ambiente es muy frío.

Dolor auditivo: causas más comunes
El dolor de oídos puede ser muy intenso. (Foto Prensa Libre: Dosfarma)

Este problema suele deberse a que tienen en esa zona auditiva una gran cantidad (mayor que lo habitual) de vasos sanguíneos, los cuales se contraen y provocan un dolor punzante, cuando las temperaturas son muy bajas, según Dosfarma.

Consejos para prevenir infecciones

El 84% de las consultas al otorrino en verano se asocian a la otitis”, explica la doctora Elena Pont, del Departamento de Salud de Manises (Valencia, España).

Para ayudar a prevenir esta molestia, los expertos en Otorrinolaringología del Hospital de Manises aconsejan “seguir una rutina consistente en secar de manera cuidadosa los oídos tras cada baño para asegurarse de que no quede agua en su interior”.

El uso de tapones o gorros de baño puede reducir la posibilidad de que el agua penetre en los oídos, siendo recomendables para personas con especial sensibilidad”, según la doctora Pont.

“En personas que sufren tapones de cerumen de repetición se aconseja utilizar esprays reblandecientes una vez por semana durante el año”, según los especialistas de Manises, que recalcan la importancia de evitar el uso de bastoncillos (hisopos) y otros objetos para limpiar o rascar los oídos, porque pueden irritar la piel y causar que la cera obstruya el canal auditivo.

Si el agua se queda retenida en el conducto auditivo, Pont explica que “en caso de que no se sufra de perforación del tímpano crónica o aguda, se puede aplicar alcohol boricado a saturación en gotas preparado en farmacias”.

Si la infección avanza, será conveniente acudir al médico”, concluye la doctora Pont.