Justicia

Empieza juicio contra la banda Sierra Ovando que habría secuestrado y enterrado a sus víctimas en Amatitlán

En marzo de 2014 las autoridades capturaron a siete integrantes de la estructura Sierra Ovando, señalados de haber secuestrado a personas y haberlas enterrado en vehículos.

Acusados en el caso de secuestros y homicidios, durante la primera audiencia del juicio contra 20 personas. (Foto Prensa Libre: Byron García)

Acusados en el caso de secuestros y homicidios, durante la primera audiencia del juicio contra 20 personas. (Foto Prensa Libre: Byron García)

La manera de operar de la estructura denominada por las autoridades como Sierra Ovando se empezó a discutir este 25 de febrero en el Tribunal de Mayor Riesgo A, presidido por la jueza Yazmín Barrios, en el comienzo del debate contra 20 personas acusadas.

En la primera audiencia del debate, el Ministerio Público (MP) recordó los hechos por los que enfrentan juicio varios exagentes de la Policía Nacional Civil (PNC), y algunos  policías activos. La jueza les consultó si querían declarar, pero la mayoría se abstuvo.

La estructura, según los fiscales, operó de 2001 a 2013, en los primeros dos años del gobierno de Otto Pérez Molina, quien está procesado por corrupción en dos casos.

En el comienzo del juicio,  dos exagentes negaron los señalamientos del MP frente a la jueza Barrios.

Un fiscal cuestionó a Adán Téllez Gaitán, agente de la PNC que aceptó declarar en el juicio, sobre el uso de un autopatrulla y los recorridos habituales que efectuaba, cuando fue detenido.

“Dejaba de usar el autopatrulla a las cero horas -medianoche- y luego se la entregaba a otro agente y me iba a descansar, luego volvía a recibir a las 8 horas, eran turnos de ocho por ocho. Si había un variación solo era autorizada o aprobada por el jefe de la estación”, expuso Téllez Gaitán.

Estructura

El MP identificó como cabecillas a Nelvin Francisco Aguilar Monterroso, alias Sierra, y los supuestos sicarios de la organización Cristian Haroldo Melgar Velásquez, Élfego Rosalío Carías Morales y Héctor Reginaldo Morente.

Según la investigación de la Fiscalía, la banda ubicaba a la víctima y le hacían creer que tenía orden de captura, los miembros de la estructura usaban trajes similares a los de la PNC y los secuestraban y luego exigían rescate. En muchos de los casos la personas secuestradas ya no aparecían, señalan las pesquisas.

Además, el MP ha descubierto que los policías, supuestamente, entregaban a los detenidos a la agrupación Sierra Ovando para desaparecerlos y se determinó que montaban falsos puestos de registro en carreteras para raptar a víctimas.

El 3 de abril de 2013, siete miembros de una familia y el guardián desaparecieron cuando aparentemente 20 hombres de la banda que portaban chalecos de la PNC y el MP se los llevaron, supuestamente detenidos, cuando se encontraban en su vivienda en Amatitlán.

La estructura fingió un allanamiento y se llevaron a Tereso Marvin Méndez Chuni, de 38 años; su esposa, Edilma  Janete Esquite García, 37, y sus hijos Marvin Oseas, 14, y Viviana Edilma, 12, de apellidos Méndez Esquité.

También estaban desparecidos Edi Isabel Méndez Chuni, de 34; Carlos Enrique Méndez Chuni, de 32; Conchita Méndez Chuni, de 39, y el guardián de la vivienda, Domingo Rodríguez Córdova, 54.

ESCRITO POR:

Edwin Pitán

Periodista de Prensa Libre y Guatevisión desde hace 14 años. Especializado en radio, prensa y televisión. Periodista del año de Prensa Libre en 2018. Productor de la emisión en directo de Noticiero Guatevisión.