Su decisión se produce después de que esta semana la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte de Estados Unidos (NTSB), que investiga lo sucedido, recomendara prohibir dichas operaciones y pidiera designar una ruta alternativa para los helicópteros.
La FAA estipuló en un comunicado que se restringirán permanentemente las operaciones de helicópteros no esenciales en los alrededores del aeropuerto Ronald Reagan (DCA) de Washington y se eliminará el tráfico mixto de helicópteros y aviones.
“Si un helicóptero debe sobrevolar el espacio aéreo en una misión urgente, como asistencia médica vital, asistencia policial prioritaria o transporte presidencial, la FAA lo mantendrá a una distancia específica de los aviones“, añadió el organismo.
El martes la presidenta de la NTSB, Jennifer Homendy, consideró que hay “un problema crítico de seguridad que debe abordarse sin demora”.