Esto significa que no se le debe alimentar con jugos, papillas o licuados antes de ese tiempo. A partir de los 6 meses comienza la introducción paulatina de alimentación complementaria —además de amamantarlo—, puesto que la leche materna ya no contiene la cantidad de hierro idónea, y hay que evitar que el bebé desarrolle anemia, añadió.

La nutricionista recomendó convertir en juego los momentos en los que el bebé pruebe sus primeros alimentos, aunque se manche o desperdicie la comida.  “Durante las primeras comidas no es importante el alimento que vaya a ingerir, sino el hecho de que busque su comida y sienta necesidad de llevársela a la boca”, agregó.

Morales desaconseja darle papilla exclusivamente de los 6 a  los 10 meses, puesto que se retrasa el desarrollo de la mandíbula. “Debido a que su estómago es pequeño, si se le alimenta con leche materna y papilla, se va a saciar rápido y no vamos a cumplir el objetivo de que aprenda a comer”, dijo. Se le puede dar compotas, pero no con frecuencia.

Es importante que  coma los tres tiempos de comida —desayuno, almuerzo y cena— junto con la familia, en la mesa, y lejos de distracciones como juguetes o televisión.

Si son bebés de familias vegetarianas, se recomienda darles proteínas vegetales, como frijoles, lentejas o garbanzos, combinados con cereales como tortilla o arroz. También es importante que se les dé un suplemento de hierro.

De la misma forma que se alimenta la familia, así será la dieta del bebé, a partir del año, por lo que los padres deben evitar consumir y dar a sus hijos comida rápida, como hamburguesas y papas fritas,  aguas gaseosas y alimentos procesados.

La introducción de alimentos sólidos es un proceso que lleva su tiempo, por lo que los padres deben tener paciencia para que el bebé reconozca los sabores, y  dedicar algunos minutos para la preparación de sus comidas, concluyó Morales.

Utensilios

Cuando el bebé tenga su primer contacto con alimentos, debe tener  su plato, cucharita,  tenedor  y un vaso con agarrador en vez del  biberón, porque  este puede retrasar el desarrollo de la mandíbula.

Ricos en hierro

Los primeros alimentos que se aconseja darle al bebé son pollo o hígado, que son ricos en hierro. Se le da trozos grandes para que los tome,  los lleve a la boca y  experimente sus  sabores.

Dulce o salado

Evitar introducir, al principio, alimentos salados, puesto que tenemos más predilección por lo dulce. Se le da un alimento al día para que lo conozca y desarrolle el gusto. Todos deben ser frescos.

Frutas y verduras

Verduras duras como la zanahoria y el brócoli se le debe dar cocidas. Las frutas se le da crudas. Nunca se  debe dejar solo al bebé, para evitar que se atragante.

Sin sal ni azúcar

El bebé debe acostumbrarse al sabor natural de los alimentos. Evitar añadirles sal o azúcar, cuyo consumo debe ser moderado, para evitar, con el tiempo, enfermedades crónicas.

Alimentos prohibidos

Al bebé, antes de 1 año de vida, no se le debe alimentar con frutos secos porque pueden causarle alergias alimentarias, así como mariscos, clara de huevo, cítricos y leche entera.