Economía

La estrategia de la FAO que incluye al sector privado y que podría aumentar la producción de granos básicos

Unas 35 mil manzanas de tierra disponibles podrían cuadriplicar la producción anual de maíz, arroz y frijol.

El maíz es uno de los cultivos que ocupan la mayor superficie del área con potencial uso agrícola, pero en los últimos años se evidenció una reducción por falta de mecanización e instrumentos financieros de apoyo al productor. (Foto Prensa Libre: Hemeroteca)

El maíz es uno de los cultivos que ocupan la mayor superficie del área con potencial uso agrícola, pero en los últimos años se evidenció una reducción por falta de mecanización e instrumentos financieros de apoyo al productor. (Foto Prensa Libre: Hemeroteca)

Guatemala tiene potencial para sembrar más granos básicos y abastecer al país y al resto de Centroamérica, pero actualmente no es así y no por falta de tierras de cultivo, sino por carecer de una estructura que permita a los productores desarrollarse y volverlos más competitivos, indicó Sebastián Charchalac, representante de la Asociación Nacional de Granos Básicos (Anagrab).

“Tenemos la tierra, pero los productores necesitan de innovación y tecnología para poder mecanizar el país de la mano del sector privado”, expuso Charchalac durante la presentación de la nueva estrategia de la de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) en Guatemala para la colaboración con el sector privado 2021-2025.

Además, resaltó que el país recibe entre el 50 y 60 por ciento de contrabando de granos sin control de sanidad y calidad. “El problema es bastante grave por la falta de inocuidad y calidad de los granos que ingresan en el país”, subrayó.

En Anagrab están asociados aproximadamente tres mil productores, de 15 mil que existen en el país. Estos socios tienen disponibilidad de 35 mil manzanas de tierra, donde se podrían producir anualmente 2.8 millones de quintales de maíz, 125 mil quintales de frijol y medio millón de quintales de arroz. Si contaran con recursos financieros, técnicos y tecnológicos, se podría triplicar o cuadriplicar lo anterior, sostuvo Charchalac.

“La alianza con el sector privado ayudaría a mecanizar la situación del maíz y avanzar en la digitalización agrícola. Por lo tanto, es importante la coordinación de esfuerzos para generar más empleos”, enfatizó el representante de Anagrab.

Ricardo Rapallo, representante de la FAO en Guatemala, manifestó que el nuevo enfoque de colaboración está dirigido a agricultores y asociaciones de estos; organizaciones de productores y cooperativas; micro, pequeñas y medianas empresas; grandes compañías nacionales y multinacionales; instituciones financieras; industria, asociaciones de comercio y consorcios, y fundaciones filantrópicas.

“Solo en alianza con los recursos privados vamos a alcanzar mayores impactos”, aseveró Rapallo.

Reducción sustancial

Según el Instituto Nacional de Estadística, de los cultivos anuales, el maíz y frijol son los que ocupan la mayor superficie del área con potencial uso agrícola, ya que son la base de la seguridad alimentaria y nutricional de la población guatemalteca.

Sin embargo, el área de cultivo y producción de granos básicos registró variaciones sustanciales, de acuerdo con la Encuesta Nacional Agropecuaria (ENA), que analizó el año agrícola 2018-2019, y determinó que el maíz fue el producto con mayores caídas.

Le podría interesar: Priorizar lo urgente impide mejorar la economía a largo plazo

La muestra dio cuenta que la superficie de área cultivada de maíz equivale al 8.7 por ciento, frijol, 1.6 por ciento y arroz 0.2 por ciento, mientras que el 89.5 por ciento posee otro uso agrícola.

Respecto del volumen de producción, el maíz registró un descenso del 22 por ciento, comparada con la ENA 2017.

La producción es de 40.9 millones de quintales, mientras que en 2017 fue de 52.1 millones. La diferencia es de unos 11.2 millones de quintales menos y en parte estaría explicada por la reducción de la superficie.

Charchalac consideró que al generar nuevos estímulos al productor de granos básicos se podría compensar esa caída.

Alianza es clave

Carla Caballeros, directora ejecutiva de Cámara del Agro, destacó que la alianza es clave si el objetivo es mejorar el valor agregado y volumen de producción.

Javier Zepeda, director ejecutivo de Cámara de Industria, hizo ver que es importante que nadie se quede atrás, porque el objetivo es aumentar las oportunidades de empleo formal.

Rapallo agregó que el cambio climático es un tema en el que varios países de la región ya están trabajando y que empuja a transformar al país de una manera más integral.

Estrategia FAO 2021-2025

La FAO Guatemala compartió estrategias con el sector privado para los próximos cinco años e incluye a los siguientes actores:

  • Micro, pequeñas y medianas empresas de todo tipo de cultivos
  • Organizaciones de productores y cooperativas ya establecidas
  • Agricultores y asociaciones de agricultores en todos los ámbitos
  • Compañías nacionales y multinacionales
  • Instituciones financieras como apoyo para instrumentos de crédito
  • Industria, consorcios, asociaciones de comercio y fundaciones filantrópicas

Nuevas estrategias:

  • Innovación enfocada en calidad, tecnología y aumento de productividad de cultivos
  • Intercambio de datos y difusión
  • Apoyo en financiamiento e inversión
  • Alineamientos con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS)
  • Asesoría en el cumplimiento de los ODS
Ricardo Rapallo, representante de la FAO en Guatemala durante la presentación de la estrategia con el sector privado. (Foto Prensa Libre: Cortesía)

ESCRITO POR:

Natiana Gándara

Editora de Economía en Prensa Libre, con más de 15 años de experiencia en medios radiales, televisivos, impresos y digitales.