Antes de comenzar la audiencia, Sinibaldi intentó que el abogado Abrahan Girón lo volviera a representar, él ya había sido retirado del proceso por representar a otro sindicado que figura en el caso, no obstante hay un amparo pendiente de ser resuelto y se esperará esa resolución.
El juez de Mayor Riesgo D, Luis Archila, empezó la etapa intermedia, pero la defensa de Sinibaldi pidió la reserva debido a que se sindica de “lavado de dinero” y publicar los medios de prueba podría ser “contraproducente al proceso”.
Mientras que la Fiscalía Especial contra la Impunidad del Ministerio Público (MP) avaló la reserva y luego el juez declaró esa figura.
Previo a la audiencia, Sinibaldi dio declaraciones en los pasillos e indicó que se siente tranquilo, pues según él, ha sido un proceso que desde que se entregó a la justicia dio declaraciones y no esperaba que fuera “rápido”.
“Venía preparado mental y espiritualmente para enfrentarlo y la verdad me siento primero muy agradecido con Dios que me ha dado la fortaleza y la sabiduría para enfrentar este proceso”, manifestó.
Dijo que se encuentra saludable y se siente “confiado que las cosas se van a ir resolviendo”.
Agregó que han planteado una defensa técnica en todos los casos, que espera le permita ir solventando la situación jurídica “ya no tan en el largo plazo, sino en un mediano plazo”.
Afirmó que han hecho algunas denuncias por procesos que consideraban con ilegalidades.
Según él, no han “entorpecido” los procesos y no han “recusado jueces, ni puesto amparos para atrasar el proceso, al contrario, hemos buscado que vayamos avanzando de una manera relativamente rápida”.
El caso
A partir de una investigación del MP y la inhabilitada Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala por supuestas actividades ilícitas vinculadas con Sinibaldi, se descubrió documentación relacionada con varias operaciones de negocios en Guatemala y en otros países.
En la investigación se identificaron empresas de cartón que -por medio de la simulación de servicios- facturaban sumas millonarias de dinero proveniente de supuestos sobornos.
La facturación de las empresas se realizó de 2012 a 2014, cuando Sinibaldi fungió como ministro de Comunicaciones.
El pago a las empresas de cartón funcionaba como una especie de “ventanilla especial” para los constructores, ya que, una vez depositado el dinero, el engranaje gubernamental operaba a su beneficio, pagándoles deuda que Comunicaciones tenía con las empresas que ellos representan.
