Salud y Familia

¿Por qué es necesario atender la salud mental durante la adolescencia?

Los adolescentes atraviesan cambios en distintos ámbitos, por lo que es necesario entender cómo determinan estos el camino hacia la autorrealización.

Salud mental y autorrealización en jóvenes

La susceptibilidad emocional es común en los jóvenes, y resulta necesario acompañarlos a descifrar qué cosas sienten. (Foto Prensa Libre: Shutterstock)

El paso por la adolescencia marca un camino donde las experiencias adquiridas durante la niñez se transforman para que el cuerpo y la mente se preparen frente a las dinámicas de la adultez. Aunque pareciera una época efímera, los cambios hacen de ella una temporada intensa en revelaciones y desafíos.

Desde la perspectiva cognitiva, durante la adolescencia las personas son más conscientes de las cosas que se van transformando a niveles sociales, corporales, familiares y personales. En consecuencia, la psicóloga clínica Manuela Méndez explica que los niveles de madurez mental van mutando y forjando el carácter adulto.

Dentro de los cambios generados en esa época también se debe mencionar cómo en ocasiones los malos tratos, la violencia y la exposición a la pobreza pueden tomar lugar en la vida de los jóvenes. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), estos elementos suelen vulnerar más la salud mental de estos.

Aparte de esa cuenta, destacan las presiones sociales o las expectativas de lo que se supone los jóvenes deberían hacer en la edad adulta.

“Los adolescentes están en una época de decisiones importantes. Pueden sentirse susceptibles, a veces orillados a decidir, y también, incomprendidos por lo que quieren”, explica la psicóloga clínica Inés Zepeda en referencia a la suma del riesgo emocional.

Inés subraya que la validación emocional, así como el acompañamiento especializado en salud mental resultan necesarios para los adolescentes, ya que hay situaciones que muchas veces no podrían enfrentar en solitario.

De no tomarse en cuenta el apoyo emocional y psicológico, podría surgir una desconexión y un aislamiento. Manuela Méndez señala que, al no existir información suficiente sobre este tema, los adolescentes y jóvenes podrían llegar a callar su estado emocional para no ser sujetos de burla o de juicios.

“(En consecuencia) al no encontrar un espacio seguro para expresar sus pensamientos, situaciones o emociones que les afecten de manera significativa, los jóvenes podrían tener problemas en su comportamiento, relaciones interpersonales, vida académica, relaciones familiares y desarrollo personal”, agrega la psicóloga.

Más allá de este panorama habitual, se debe tomar en cuenta la aparición de los trastornos mentales. La OMS comparte que este viejo conocido en los adolescentes llega a presentarse en uno de cada siete en algún momento entre los 10 y los 19 años.

Entre las principales enfermedades de salud mental en este grupo se encuentran la depresión, la ansiedad y los trastornos del comportamiento. Este escenario presenta una gran alarma ya que la depresión puede llevar hasta el suicidio, siendo este el cuarto causante principal de muerte en adolescentes que se encuentran en medio de los 15 y los 19 años.

Estas cifras han llevado a crear conciencia alrededor del mundo, y por ello se han impulsado iniciativas como el Día Mundial de la Prevención del Suicidio, que se celebra anualmente el 10 de septiembre, y que es organizado por la Asociación Internacional para la Prevención del Suicidio, mediante el aval de la OMS.

Los factores de riesgo tanto del suicidio como de los trastornos mentales son diversos, y por ello se requiere aumentar la atención especializada, sobre todo, aquella que parte de los adultos responsables de adolescentes y que se amplía con los expertos en salud mental.

La psicóloga Manuela Méndez subraya que, para mantener esta parte de los adolescentes cuidada, es “primordial no crear un estereotipo por los comportamientos presentados y mantener la escucha activa, así como promover la comunicación asertiva para establecer espacios seguros”.

Salud mental y autorrealización en jóvenes
La falta de comunicación sobre los sentimientos puede llevar a un aislamiento considerable en los adolescentes. (Foto Prensa Libre: Shutterstock)

Ante cualquier escenario, es importante que los jóvenes reconozcan las dificultades de la vida, por lo que es recomendable que sus adultos responsables les motiven a gestionar de manera adecuada sus emociones, partiendo de la propia experiencia.  

“Los adultos deben ser ejemplo tomando en cuenta que también tienen dificultades. Es necesario enseñar las mismas maneras de enfrentamiento que tienen y que les funcionan. Se recomienda además escuchar abiertamente y normalizar la búsqueda de ayuda en cualquier momento”, sugiere Inés Zepeda.

Además de las mencionadas, estas son otras formas que las psicólogas comparten para acompañar a los adolescentes y validar su experiencia en medida del crecimiento:

  • Realizar encuentros periódicos para conversar sobre su estado emocional.
  • Apoyar las iniciativas que presenten.
  • Formar parte de sus metas y motivar a que las sigan realizando.
  • Incentivar su autonomía.
  • Hablar sobre la importancia de la salud mental.
  • No juzgar los errores que cometan, sino plantearles la posibilidad de la resolución y la responsabilidad para enmendarlos.
  • No desvalorizar sus emociones.
  • No comparar las emociones con las del adolescente.
  • Normalizar y facilitar el acceso a profesionales de salud mental.

Estas iniciativas podrían llevar a que los jóvenes vean más claro un camino hacia la autorrealización y una mejora en su autoestima -la cual se forma de consideraciones como el respeto, la valoración, el amor y la aceptación personal.

Desde un punto de vista positivo y constructivo, la autoestima pueda dar cuenta de las habilidades adecuadas para la visión y el trato de una persona a sí misma, explica Manuela Méndez.

Salud mental y autorrealización en jóvenes
Desde la perspectiva cognitiva, durante la adolescencia las personas son más conscientes de las cosas que se van transformando a niveles sociales, corporales, familiares y personales. (Foto Prensa Libre: Shutterstock)

Para construir el autoestima es necesario que, en este caso, los jóvenes reconozcan cuáles son sus cosas “buenas y malas”, y que tengan una mirada más clara de lo que les gusta de sí mismos y qué les gustaría mejorar. Además, destaca la confianza personal en lo que se pueden llegar a lograr y qué tan capaces son de quererse, agrega Inés Zepeda.

¿Cómo pueden los adultos responsables de los adolescentes ayudarles a estimular su autoestima? A consideración de Inés, no se trata de hablarlo, sino de practicarlo.

“No solo felicitándolos desde pequeños se logra. Es importante invitarlos a ser críticos en lo que hacen para que aprendan a evaluar sus decisiones. En esos momentos puede hacerse énfasis en preguntarles cómo se sienten”, comparte Zepeda.

Salud mental y autorrealización en jóvenes
La capacidad de autoreconocimiento, así como de confrontación ante las limitantes de la vida pueden conducir a una buena autoestima. (Foto Prensa Libre: Shutterstock)

Manuela Méndez subraya que, para poder involucrar a los adolescentes en el tema de autoestima y autovaloración, el adulto que lo inducirá debe tener un autoestima equilibrada y sana.

También es necesario inculcar y enseñar sobre el juicio personal ante las situaciones vivenciales, la aceptación (física y emocional) de sí mismos, el reconocimiento, la aceptación de su personalidad, el desarrollo de la empatía, la práctica del altruismo, y el fomento de espacios para estimular la creatividad.

ESCRITO POR:

Alejandro Ortiz

Periodista de Prensa Libre especializado en temas sobre cultura y bienestar, con 5 años de experiencia.