Las tres versiones del Mingob sobre los hechos en Nahualá que dejaron 13 muertos y que el MP investiga
Los informes policiales sobre los hechos en Nahualá presentan versiones distintas sobre el papel del Ejército y la actuación de los agentes.
Familiares velan a varias de las 13 personas fallecidas durante los enfrentamientos en Nahualá, ocurridos el 13 de diciembre. (Fotografía: Hemeroteca PL)
Luego de que Prensa Libre hiciera público el 18 de diciembre un informe circunstanciado de la Policía en la que se relataban los enfrentamientos del 13 de diciembre en Nahualá, Sololá; en donde se aseguraba que el Ejército había atacado a pobladores y una autopatrulla de la Policía Nacional Civil (PNC), surgieron dos reportes más sobre los sucesos.
Los tres documentos están en poder del Ministerio Público (MP), que recibió la denuncia en su sede fiscal de Sololá. En ellos se consignan hechos distintos que habrían ocurrido ese sábado, según información a la que este medio tuvo acceso.
El informe circunstanciado, la denuncia ante el MP y una ampliación posterior contienen relatos sobre el papel del Ejército, la supuesta coacción contra agentes de la PNC y el número de víctimas.
Mientras tanto, el Ministerio de Gobernación (Mingob) asegura que el primer informe circunstanciado —publicado por este matutino el pasado jueves— consigna que el Ejército atacó a la Policía; sin embargo, sostiene que esa información es errónea, porque fue redactada “bajo amenazas, extrema violencia y riesgo inminente de muerte”. Por ello se presentaron ante la Fiscalía dos ampliaciones para aclarar lo sucedido.
No obstante, la denuncia que consta en la Fiscalía Distrital de Sololá no consignaba, hasta ayer, que los policías de la subestación 72-4 fueron obligados a redactar el informe circunstanciado bajo amenazas.
Registro de hechos
Los informes coinciden en que un grupo de personas llegó a la subestación policial para solicitar que la PNC los acompañara a buscar a cinco personas desaparecidas en el área montañosa de la aldea Pachipac.
El informe circunstanciado 1421-2025, del 13 de diciembre, señala que miembros del Ejército dispararon contra la población y contra los agentes de la PNC.
El documento detalla que murieron 12 personas durante los enfrentamientos; sin embargo, cinco días después de haber sido escrito, firmado y sellado, la PNC y Gobernación declararon que esa información era falsa y que los agentes fueron coaccionados por criminales para consignar esos hechos.
La ampliación del informe, consignada en el oficio 1423-2025, señala que un grupo de 50 personas, encapuchadas, con chalecos antibalas y “portando armas de grueso calibre”, agredió a los agentes con bofetadas, patadas y con las culatas de las armas que portaban.
“Fueron llevados en contra de su voluntad y bajo amenazas de muerte”, consigna la ampliación del informe.
Añadieron que, al llegar a la cima de la montaña, había un grupo aproximado de 300 personas encapuchadas y fuertemente armadas, “quienes dispararon con lujo de violencia y agresión contra nuestra integridad física”, indicó la Policía. En esa montaña la PNC halló cinco cadáveres.
Esa transmisión fue interrumpida por un helicóptero que sobrevolaba el área, donde se escuchaban detonaciones de proyectil de arma de fuego. Los pobladores exigían información sobre quién había ordenado el vuelo, según el segundo informe.
La PNC indica que, a las 21 horas, se sostuvo una reunión con personal del comité de seguridad de Pachipac, donde, bajo amenazas de muerte, solicitaron un informe circunstanciado redactado “a su manera” a cambio de liberar a los agentes retenidos. Dos horas más tarde, la Policía entregó una copia de ese documento a los pobladores.
Un tercer reporte, presentado el 16 de diciembre ante el MP como una ampliación del primero y registrado con el número 1424-2025, señala que la Policía de Nahualá fue obligada a subir a la montaña para recuperar los cadáveres, mientras les apuntaban a la cabeza con armas de fuego.
En esta tercera versión de los hechos se menciona que hubo fuego cruzado entre el Ejército y grupos armados, y se afirma que los policías solicitaron al Ejército, vía radio, el cese de disparos.
Los agentes, entre ellos el oficial segundo, relatan que intentaron comunicarse con el Ejército para detener el fuego cruzado: “Solicitamos vía llamada telefónica a los mandos de la Comisaría 72 para que se coordinaran con el coronel a cargo del destacamento militar y que no nos siguiera disparando”, señala la ampliación.
La ampliación también documenta el robo de armas, uniformes y equipo táctico de la PNC, la redacción forzada del informe “a manera de los pobladores” y la intervención de líderes comunitarios para negociar la liberación de los agentes.
De acuerdo con el MP, tiene en su poder a los oficios y están llevan a cabo más diligencias para fortalecer la investigación. Agregó que están analizando trasladar el caso de la Fiscalía Distrital de Sololá a una fiscalía especializada ubicada en la Ciudad de Guatemala.
Número de víctimas mortales
El 16 de diciembre pasado Marco Villeda, ministro de Gobernación, reconoció en declaraciones radiales que 13 comunitarios y un soldado del Ejército perdieron la vida durante los enfrentamientos.
“No se trata de una agresión de una comunidad contra otra, es un ataque directo contra el destacamento militar. No habría razón para que el Ejército actuara de forma proactiva contra las comunidades, salvo que haya un ataque directo”, indicó el titular de la cartera del Interior.
Aunque Gobernación asegura que un soldado murió, la Dirección de Prensa del Ministerio de la Defensa (Mindef), negó tal extremo.



