Salud y Familia

Cómo cuidar las tortugas que viven en peceras pequeñas

Si busca a una mascota que ocupe poco espacio y su mantenimiento no sea tan costoso, estos animales podrían ser la opción perfecta.

Tener una mascota es algo que crea ilusión a la mayoría de personas. Disfrutar de su compañía, cuidarlas y aprender sobe ellas, su especie y comportamiento resulta fascinante para muchos.

Si está buscando una tortuga que no crezca demasiado para poder tenerla en casa, aquí le compartimos las especies de tortugas domésticas de agua dulce que son las más comunes y las más recomendadas:

  • Tortuga de orejas rojas o de Florida: Esta es la especie más común de las tortugas domésticas y se caracteriza por tener manchas alargadas y rojas en ambos lados de la cabeza. Pueden llegar a medir hasta 40 cms y están activas al mismo tiempo en que lo suelen estar los humanos, por lo que duermen en la noche y en las primeras horas de la mañana, y no representarán una molestia en los horarios de descanso de sus dueños.
  • Tortuga de orejas amarillas: esta especie es de color oscuro y con líneas de color amarillo en cabeza, patas y cola, las cuales sobresalen de su caparazón. El vientre también es de color amarillo, y tienen algunas manchas oscuras. Pueden llegar a medir entre 20 y 30 cms.
  • Tortuga de Cumberland: este tipo de tortuga se diferencia por su caparazón ovalado, de color verde oliva y pequeñas manchas amarillas. Su cabeza, cola y patas tienen líneas amarillas y pueden llegar a crecer hasta 21 cms.
Las tortugas hembras son más grandes que los machos. Otra forma de diferenciarlas es que las uñas frontales de los machos son mucho más alargadas que en las hembras. (Foto Prensa Libre: Pablo Juárez)

Las tortugas acuáticas domésticas viven entre 10 y 20 años. Estas tres especies pueden moverse tanto en el agua como en tierra. El veterinario Mario Castillo explica que un ambiente adecuado para una tortuga debe estar compuesto de una parte seca y otra con abundante agua. Además comenta que se alimentan tanto de proteínas de origen animal como de vegetales. “Su alimentación debe ser equilibrada y varía conforme el animal crece, por lo que cada vez que compre su dotación debe darle el dato de la edad al vendedor”.

Las tortugas jóvenes deben alimentarse a diario, pero las adultas pueden comer cada 2 o 3 días. (Foto Prensa Libre: Servicios)

A partir de los 3 años su apetito suele disminuir de forma natural. Sin embargo, antes de cambiar la frecuencia de su alimentación lo mejor es que la lleve donde un veterinario para asegurarse de que la disminución en el apetito no se trata de un problema de salud o malestar.

“El tiempo que tiene de vida la tortuga se la pueden indicar al momento en el que la compre. De lo contrario -y para asegurarse de que su estado de salud está bien- al momento de obtenerla tome una muestra de materia fecal y llévela junto con la tortuga a algún veterinario. El profesional se asegurará de que la condición física del animal sea buena, además de compartirle consejos sobre su cuidado”, dice.

Las ventajas de tener uno de estos reptiles son bastante fáciles de identificar: no ocupan mucho espacio, comen poco y en general su mantenimiento además de ser económico, es poco demandante en comparación del que requieren otros animales como los perros o gatos.

En cuanto al aseo debe tomar en cuenta que las tortugas suelen defecar en el agua, por lo que usted debería de limpiar el lugar donde la tenga todos los días para evitar enfermedades y darle buenas condiciones de vida. Castillo sugiere que para evitar esto puede mover a  la tortuga otro espacio mientras come y durante otro rato más a modo de mantener más limpio la pecera donde permanece el resto del tiempo.

Si tiene una buena bomba de agua (son las encargadas de hacer circular el agua para formar ríos o cascadas), puede cambia entre un cuarto o la mitad del tanque por semana y limpiarlo por completo una o dos veces al mes. También necesita un sistema para calentar el agua, que debe estar entre 24 y 30ºC. Use un termómetro para controlar la temperatura, pues si está muy fría la tortuga no comerá y si está muy caliente tampoco estará cómoda.

Debe tomar en cuenta que conforme estos animales crecen también empiezan a pesar más y rápidamente el terrario o pecera en la que viven empieza a quedarles pequeña. Además, aunque pueden parecer muy tiernas, no son tan ideales para los hogares en donde hay niños pequeños porque son tímidas y asustadizas y ante lo que pueden percibir como una amenaza (como un niño que desee sacarla de su espacio), también pueden tornarse agresivas.

Contenido relacionado:

> Lo que debe saber antes de tener un hámster

> Epilepsia en perros: Cuáles son los síntomas y cómo tratarla

> Cómo hacer que los perros y los gatos se lleven bien

ESCRITO POR:

ARCHIVADO EN: